La isla indonesia de Bali es un destino fácil. A ella se acude generalmente como relax y para disfrutar de su mágica cultura, su gastronomía, sus compras, sus costumbres y sus maravillosas playas. Y, aunque no te resultará difícil desenvolverte en su ambiente, te mostramos cinco informaciones imprescindibles sobre Bali que quizás te gustará conocer antes de viajar a la isla.
Desplazarse en Bali
Puede que lo más complicado de Bali sean los desplazamientos en la Isla. El transporte privado es costoso, el público un desastre y el alquiler conlleva en muchas ocasiones perderse entre arrozales y volcanes.
Arrozales de Bali |
Los autobuses colectivos se llaman bemos y se trata de pequeñas furgonetas atestadas de locales, sacos de arroz, verduras y animales vivos. Se encuentran concentrados en lugares concretos de cada ciudad y su precio es bajo -los extranjeros pagan más que los balineses- aunque, como todo en Bali, hay que regatearlo previamente. El problema de los bemos, además de su incomodidad y de que no existen horarios fijos, es su lentitud por las múltiples paradas para subidas y bajadas de pasajeros. Quizá esté bien para mochileros y viajeros de bajo presupuesto, pero como en cualquier otro lugar de Asia, subir a un autobús en Bali es como para pensárselo.
Bemo decorado en Kuta |
La segunda de las opciones es el taxi que, por supuesto, no llevan taxímetro y hay que regatear. Pero los taxistas/conductores de Bali son unos piratas y sueles encontrarte con situaciones como las de pactar un precio y que te exijan más dinero al llegar al destino. Los únicos taxis que disponen de taxímetro son los de la compañía Blue Bird, aunque tampoco son muy de fiar, con lo que deberás ser tú el que esté pendiente de que bajan bandera al subir al vehículo.
Vehículos en Kuta |
Contratar un taxi en el aeropuerto de Denpasar se lleva la palma. Son unos auténticos ladrones. Con lo que la mejor opción es haber reservado el desplazamiento con el hotel, o bien, contratarlo a través de internet a un precio razonable en la página www.suntransfers.com. Aunque el precio orientativo de un trayecto del aeropuerto a Ubud es de 300.000 Rp (20€), nosotros pagamos 350.000 Rp (23 €), aunque realmente querían cobrarnos 400.000 Rp (26,50 €). Con la página suntransfers de traslados hubiéramos pagado sólo 17€, pero tuvimos un problema al hacer el pago y tuvimos que lanzarnos a la batalla al desembarcar en Denpasar.
Otros precios orientativos son:
Ubud – Aeropuerto: 200.000 Rp
Ubud – Sanur: 150.000 Rp
Aeropuerto – Sanur 80.000 Rp
Sanur – Kuta 180.000 Rp
Ubud – Uluwuatu (Zona sur) 250.000 – 300.000 Rp
Ubud – Padang Bai 200.000 Rp
Nusa Dua – Kuta 90.000 Rp
Ubud – Kuta 250.000 Rp
La tercera de las opciones es el alquiler. Una vez más, el precio al que se consigue alquilar el vehículo depende de la población de alquiler (en Kuta, por ejemplo, es más caro alquilar que en Ubud), del tipo de vehículo, y del negocio donde se alquile. Pese a que no es común que verifiquen que posees el Permiso Internacional de Conducir, éste es necesario para conducir en Bali; así que por los 8.90 € que cuesta su expedición, es mejor no arriesgarse.
Permiso Internacional Para Conducir |
Lo mejor para alquilar un vehículo es mirar y preguntar. Por lo general, alquilar una moto cuesta alrededor de 50.000 Rp/día y llenar el tanque 160.000 rp. El alquiler de una bici ronda las 25.000 Rp/día, aunque realmente no encuentro mucha utilidad en el alquiler de una bicicleta en Bali. Mientras que alquilar un coche viene a costar entre 120.000/ 150.000 Rp/día.
Sin embargo, el principal problema del alquiler de motocicletas y automóviles en Bali son las carreteras y la forma de conducción. Las carreteras son estrechas, sin arcén y se encuentran mal señalizadas y muy transitadas. Y en cuanto a la forma de conducción, se trata de coches con el volante a la derecha en los que se debe circular conforme al Código de Circulación Británico, esto es, por la izquierda. La falta de señalización y la ausencia de mapas son problemas añadidos a la hora de moverse por la isla, aunque se puede recurrir a aplicaciones como maps.me en el móvil con la que sólo requieres wifi a la hora de descargar los mapas, pero luego funciona sin conexión a internet.
Aparcamiento de motos en Kuta |
Por último, se puede optar por contratar paquetes para visitar los lugares de la isla que se deseen. Éstos paquetes son ofertados en cualquier hotel, en las cientos de agencias que existen en Bali e, incluso en la calle. El problema radica en que los circuitos son caros. No se contrata un coche con un conductor independientemente de los ocupantes, sino que cada cual paga su peaje, así que pagar una excursión media a 180.000 Rp (26€) por persona, es un poco caro. En nuestro caso, de haberlo hecho así, nos hubiera costado cada excursión una media de entre 60 y 80€, y al menos a nosotros, nos parece excesivo.
Folleto con precios y excursiones en Bali |
Alquiler de Tablas y Barcos
Bali, en general, y la playa de Kuta, en particular, es paraíso de surferos. La mayor parte de ellos cargan con sus tablas desde el otro extremo del mundo para subirse a las olas del mar de Bali y surfear en una de las playas internacionalmente conocidas por los amantes de este deporte; pero luego están los aficionados: los que alquilan una tabla por unas horas, los que pretenden aprender en unos días y los que, como nosotros, nos pegamos un garbeillo con una tabla de body board.
Yayo y Macarena buscando la ola |
Las tablas en Bali están un poquito descuidadas. Supongo que esto será como al que le gusta el golf: los palos de alquiler siempre tendrán una pega. Quizá haya lugares donde sí alquilen buenas tablas, pero yo, que no soy aficionada al surf, desconozco. Hablamos entonces de las tablas que se alquilan en las Playas y que están clavadas como palos en la arena con las que morenos de ojos rasgados, tatuajes y tinte rubio se buscan la vida.
Alquiler de tablas en Kuta |
El alquiler de una tabla de surf en Kuta oscila entre los 2,50 y los 6,50 €. Y el alquiler –hasta que te canses- de una tabla gastada de body board que te despelleje la tripa es de 30.000 Rp (2€). Eso sí, hay que discutir ineludiblemente el precio hasta llegar al acuerdo final.
Barcos balineses en Kuta Sur |
Por otra parte, hay quien alquila, al final de la playa de Kuta Sur –junto a la pista de aterrizaje del aeropuerto- un barco para que lo acerque al arrecife y pasar allí horas surfeando hasta que se cansa. Esto cuesta unas 50.000 Rp (3,50 €) ¿Y cómo funciona? Pues contratas descalzo y en bañador, tabla en ristre y dinero en mano, a un barquero que te lleva y quedas con él en la hora a la que ha de recogerte. Tú te quedas y él se marcha, y si te cansas antes, pues te aguantas. Así que se observa en el horizonte a decenas de surferos sentados sobre sus tablas torrándose al sol tras un exhausto y contínuo ejercicio de surcar las olas.
Yayo volviendo de un día de pesca |
El precio, sin embargo, para las salidas a pescar es mucho más elevado. Y si lo contratas en una agencia o en uno de los puestos turísticos de la playa más aún. Hay que ir también hasta el final de la Playa de Kuta Sur, donde se encuentran las casas de los pescadores junto a la pista de aterrizaje del aeropuerto y allí, echar paciencia para negociar un precio. A Yayo le dejaron cada salida de unas 600.000 Rp (40€), pero nada de embarcaciones de fibra a motor. Se trata de los barcos de los pescadores locales.
Compras
Mercado de Ubud |
Bali es un paraíso para las compras. Además de las mil chorradas que se pueden encontrar en sus cientos de tiendas, la isla es exportadora de miles de productos a Occidente: muebles, esculturas, objetos de decoración.
Mercado de Ubud |
En Bali se combinan los puestecillos callejeros de pareos, sarongs y camisetas; con las pequeñas tiendecitas de artículos de plata, nácar o las sandalias y los bolsos de piel. Pero la isla también es famosa por sus pinturas, sus artículos de madera o sus cometas.
Mercado de Ubud |
Por otra parte, existen grandes superficies dedicadas a la venta de souvenirs y artículos locales en los que el costo es un poco más elevado que en la calle como peaje por el pago de un precio fijo sin regateos.
Discovery Shopping Mall – Kuta (Bali) |
Tras el tsunami, los grandes centros comerciales de lujo han proliferado como las setas. Ya existían antes, pero no hasta tal nivel de glamour y distinción con los que se muestran en la actualidad: Armani, Versace, Ralph Laurent,… comparten espacio con Zara, Surfer Girl, Havaianas, etc.
Así que, si viajas a Bali y eres de los que disfruta comprando, lleva tu maleta vacía y tráela llena de todo lo que te guste. Te saldrá baratísimo.
Comida
La comida en Bali es buena. Personalmente me gustan más los sabores Khemer de Camboya o la forma de cocinar el marisco en Malasia, pero no creo que haya nadie que se pueda quejar de la comida y la variedad balinesa. Además de las más importantes fraquicias internacionales, como Jamie´s o Hard Rock, ubicadas estratégicamente en el sur de la Isla, se pueden encontrar pizzerías, mejicanos y restaurantes de comida rápida como (KFC, McDonald´s o Burguer King) y pequeños warungs donde comer delicioso satay (pinchitos aderezados con salsa de cacahuete) o baby guling (cochinillo asado) –tres raciones 6€-.
De nuestro primer viaje recordábamos lo barato que era sentarse a la mesa en Bali. Y, pese a que los precios han subido considerablemente en estos once años, una comida a base de crustáceos, pescado y marisco no excede los 40€ (dos adultos y un niño). Para el resto, se suele pagar una media de 20€.
Vestimenta
Creo que sobrará decir que al ser Bali un destino de sol y playa no hay problema en llenar sólo la maleta con bañadores, bermudas, camisetas y chanclas. Hay quien, sin embargo, añade al equipaje ropa “más arregladita” con la que salir a cenar o ir a la discoteca.
Para mí, el ir descamisado o en bañador por la calle me ha parecido siempre una falta de educación y, sobre todo, una grosería a la hora de sentarse a la mesa. Pero allí, como en Salou, hay quien lo hace.
Pura Besakih – Bali |
Pero donde no se permite ni la más mínima falta en la etiqueta y el decoro, es en los Templos Balineses. La norma es rigurosa: sarong para hombres y mujeres y hombros cubiertos. En algunos templos de la isla, la entrada incluye el sarong, pero en la mayor parte de ellos debes alquilarlos a parte. Lo mejor es comprártelo si la intención es visitar unos cuantos, así te ahorrarás discusiones y, además, podrás traer un bonito recuerdo a la vuelta.
6 comentarios
Una información muy interesante, Macarena. Gracias por compartirla. Estoy de acuerdo contigo en que, seas o no turista, debes mantener el decoro en cualquier lugar al que vayas.
Yo también odio a los turistas que se ponen a comer, en Salou, en la mesa de tu lado, sin camisa. Es de tan mala educación!. Un beso, guapísima.
De mala educación y de falta de respeto. Una cosa es ser mochilero, turista o viajero y otra faltar al decoro. No se trata de ir encorbatado, solamente de cubrirse el torso, pedir las cosas por favor, dar las gracias y no hacer el cochino. Un beso Elisenda.
Joseme, eres un encanto. Sólo te digo que todo es proponérselo en serio. Muchas felicidades a ti también y que sepas que tu blog es para mí igual de interesante que para ti el mío. Mil besos. Y… se te echaba de menos.
Hola Macarena, como te dejé en mi blog, felicidad para este nuevo año y que sigas en tus viajes tan maravillosos, yo éstos ni me los planteo, por eso lo disfruto cuando lo cuentas con detalle. Un abrazo espero los próximos viajes.
Dale a tu cuerpo alegría Macarena! Heeey Macarena! (Salto y repite)
Muy bueno, Paco.