Battambang, la segunda ciudad más grande de Camboya, es un destino que sorprende. A pesar de su tamaño, conserva una atmósfera tranquila, con calles coloniales, campos de arroz interminables y una vibrante escena artística. No tiene el turismo masivo de Siem Reap, pero eso es precisamente parte de su encanto.
La ciudad cree que fuera de ella no hay más que paisaje, patatas y leche; ignoran que también existe una cultura noble, antiquísima e insobornable.
Qué ver y qué hacer en Battambang
Bamboo Train (Norry)

Una de las atracciones más curiosas de Battambang en el tren de bambú. Esta plataforma de bambú sobre raíles, impulsado por un pequeño motor, recorre unos 7 km entre campos y aldeas. Aunque es turístico, sigue siendo divertido y ofrece un vistazo al ingenio local.

El Tren de Bambú, antiguamente utilizado para transportar verdura y arroz, ha sido conservado como reliquia del pasado para atracción turística. Una plataforma de madera y bambú sobre unos rodamientos accionados por un pequeño motor con una correa de ventilador, transporta a los pasajeros a través del tiempo, a lo largo de 7 kilómetros de vías, entre la maleza y los campos de arroz. Si una vagoneta se encuentra con otra de frente, la solución es bajar a todos los pasajeros, desmontar el tren rápidamente y esperar en uno de los lados de la vía hasta que pase.

La vagoneta puede alcanzar los 15 ó 20 kilómetros por hora, lo que unido a estar subido a una plataforma sin ningún tipo de protección, te proporciona una sensación de vértigo inigualable. Y además, el trayecto es relativamente largo, y si a ello añadimos las subidas y bajadas, los montajes y desmontajes, entre la ida y la vuelta, pueden pasar una hora.

Al final de la vía, suelen hacer una parada de unos 15 minutos por si quieres comprar algo en unas cuantas chozas con souvenirs, y de no comprar nada, la señora te deja caer suavemente que le des algo de propina al conductor. Bastan 2 ó 3 $.

En la actualidad, el gobierno de Camboya está poniendo de nuevo en marcha su infraestructura ferroviaria, además de haber mejorado las carreteras, así que ha prohibido el uso del tren de bambú más allá de la nueva autovía. Por ello, se ha ideado un tren de bambú turístico más cercano a la ciudad, y más caro, que en unos cuantos minutos simula desplazarte por unas pequeñas vías.

Pero el antiguo tren de bambú sigue funcionando a unos cuantos kilómetros de Battambang. Las políticas gubernamentales han obligado a los antiguos conductores a desplazarse y, como el lugar está alejado y las carreteras no están en el mejor estado, los conductores de tuk tuk directamente te llevan a la nueva atracción. Por ello, nosotros negociamos expresamente con el conductor que queríamos ir hasta el “antiguo tren”.

Hoy, las vagonetas se ubican en un hangar, y el precio del viaje sigue siendo de 5$ por persona. Sólo va un grupo por vagoneta y la dinámica sigue siendo la misma de hace diez años. Viajas entre campos de arroz hasta que encuentras una vagoneta de frente. Es entonces cuando toca bajar a los pasajeros del grupo menos numeroso, desmontar y volver a montar de nuevo.
El final se encuentra a una media hora del inicio y allí, te ofrecen souvenirs o bebidas. Finalizado el descanso toca volver y dar una propina al conductor.
Phnom Sampeau y Bat Cave
Phnom Sampeau

Phnom Sampeau (o Phnom Sampov) es una colina kárstica de unos 100 metros de altura que se alza en medio de los campos de arroz a unos 12 km al suroeste de Battambang. Es uno de los lugares más significativos para entender la historia reciente de Camboya, pero también un sitio espiritual y escénico que ofrece vistas espectaculares.

En la cima de la colina se encuentran varios templos budistas activos, pagodas y santuarios, muchos de ellos decorados con estatuas de Buda, dragones y pinturas murales. Los monjes viven allí, y el ambiente es sereno, a pesar de la historia trágica del lugar.

Para llegar, puedes caminar por una carretera empinada, subir una larga escalera o hacerlo en coche por 10$, algo altamente recomendado dada la pendiente de la subida y el alto grado de humedad.

Killing Cave

En la cima de Phnom Sampeau se encuentran también las Killing Caves.
Durante el régimen de los Jemeres Rojos (1975–1979), Phnom Sampeau fue utilizado como centro de ejecución y tortura. En una de sus cuevas, conocida como Killing Cave, se arrojaban cuerpos de víctimas desde una abertura en lo alto. Hoy, el lugar se ha convertido en un memorial, con una urna de cristal que contiene restos óseos y una estatua de Buda yacente que simboliza la paz.

Esta visita fue una de las que nos quedó del anterior viaje, pero siento decir que me resultó decepcionante. Todo allá arriba está bastante sucio y destartalado.

Bat Cave

En la ladera de Phnom Sampeau, cada día al atardecer (alrededor de las 17:30–18:00), millones de murciélagos salen en enjambre desde una cueva en dirección al Tonlé Sap para cazar insectos. Lo hacen en una columna oscura y ondulante que se extiende durante varias horas en el cielo, creando un espectáculo visual impactante.

Esta visita sí que supuso una gran decepción para nosotros, porque si tras 10 años los murciélagos siguen saliendo de forma puntual cada tarde, lo que era un espectáculo gratuito de unos pocos privilegiados, se ha convertido en un auténtico circo: sillas, mesas, puestecillos de comida, bebidas…Un auténtica locura.

Además, ahora cobran por entrar a la zona de Phnom Sampeau 1$ por persona, lo que es una auténtica estafa, teniendo en cuenta que el espectáculo se puede ver perfectamente desde cualquier parte que no sea la entrada misma de la cueva. Todo sea por contribuir al desarrollo de la economía local.

Arquitectura colonial francesa
Durante la época del protectorado francés (siglo XIX – 1953), Battambang fue un centro administrativo importante. Muchos de los edificios de esa época aún se conservan, y dan al centro un aire nostálgico y elegante.

Entre los edificios, se pueden observar antiguas construcciones de fachada neoclásica con contraventanas de madera, balcones de hierro forjado y detalles decorativos.

Destacan el antiguo juzgado y escuela francesa, ahora reutilizados como oficinas o viviendas, o la Casa del gobernador francés, un bello edificio junto al río.

Riverside Road (Street 1) es la arteria más fotogénica, así como el área del Mercado Central (Psar Nat): El mercado art déco es un icono en sí mismo, con forma de cúpula y muy activo a lo largo de todo el día.

La arquitectura colonial en Battambang no ha sido restaurada en exceso, lo que la hace más auténtica: hay pintura descascarada, postes oxidados y vegetación que trepa por las fachadas. Pero ahí radica parte de su encanto.
Templos budistas
Battambang es una de las ciudades con mayor número de templos budistas activos en Camboya. La mayoría están habitados por monjes y abiertos al público, y aunque no tienen la monumentalidad de Angkor, reflejan una religiosidad cotidiana, colorida y auténtica.
Wat Ek Phnom
Situado a 11 km al norte de la ciudad, es un templo hindú en ruinas del siglo XI, rodeado de campos de arroz y palmeras. Justo al lado hay un templo moderno con una enorme estatua de Buda, lo que crea un contraste muy fotogénico entre lo antiguo y lo contemporáneo.
Wat Banan
Similar en estilo a Angkor Wat, con cinco torres bien conservadas. Se encuentra en lo alto de una colina (350 escalones), por lo que además del interés arqueológico, ofrece excelentes vistas. Se trata de un lugar menos turístico que otros templos, lo que lo hace especial para explorarlo con calma.
Wat Samrong Knong
Ubicado al este de la ciudad, fue uno de los sitios utilizados durante el genocidio de los Jemeres Rojos. Tiene un memorial con esculturas y una estupa con cráneos. Es a la vez un lugar espiritual y de memoria.
Wat Damrey Sar («Templo del Elefante Blanco»)

Un templo céntrico con una arquitectura tradicional camboyana. Destaca por sus relieves y sus coloridas representaciones de escenas religiosas. Ideal para visitarlo caminando por el centro de Battambang.
Cómo moverse en Battambang

Tuk tuk: La forma más cómoda para explorar templos y alrededores. El precio de un día completo socila entre los 15-20$.
A pie: El centro de la ciudad es compacto y caminable.
Cómo llegar y salir de Battambang

Desde Siem Reap
Autobús o minivan: Tardan entre 3 y 4 horas y cuestan alrededor de 11$
Barco por el Tonlé Sap: Tardan entre 6 y 8 horas. Escénico pero lento, recomendable solo en temporada alta (noviembre-abril).
Coche: Tarda unas 3 horas y cuesta unos 40$.
Desde Phnom Penh
Autobús (6-7 horas): Confortables y económicos. Su precio es aproximadamente de 10$ por persona.


4 comentarios
Yo quiero un paseo en el tren de bambú!!!
Los templos y pagodas son muy bonitos. Tiene que ser una gozada observar esas bandadas de murciélagos.
Pero lo que más me ha gustado del post es ver a Macarena hija de nuevo, sigue tan bonita.
Gracias por tanta información.
Besos para todos.
Jajajajaja es que está muy chulo!!!!
Ay Carmen ¿Has visto qué mayor?
Un besazo
Un lugar precioso, tiene lugares mu y bonitos para visitar. Me han encantado las fotos tuyas y de la peque, como ha crecido!! Por ti la verdad es que no pasa el tiempo. Un beso Macarena
Macarena está muy mayor ¿Verdad? Y yo también, Vicenta.
Un besazo