Sugba Lagoon es una laguna escondida en la isla remota de Caob, rodeada de manglares y hermosas formaciones kársticas. Se dice que el área es el segundo ecosistema de manglares más grande de Filipinas con más de 4.200 hectáreas. El puerto para llegar a Sugba Lagoon se encuentra ubicado en Del Carmen, al Oeste de Siargao y se trata de una de las excursiones más demandadas en la isla.


Llegar hasta Sugba Lagoon
De General Luna a Del Carmen hay 40 km y se tarda en llegar aproximadamente una hora en moto.


Hay que dejar la moto en un aparcamiento fuera del muelle (50 Php – 1€) y acceder hasta la oficina que gestiona los barcos para desplazarse a Sugba Lagoon andando. Frente al puerto, hay tiendecitas para desayunar y comprar algún picoteo para llevar. La cuestión es que no es posible acceder con botellas de plástico al Parque Natural que alberga la Laguna. Tampoco puede fumarse durante todo el tiempo que dura la excursión.


Los tours a la Laguna están regulados por el gobierno y hay una oficina de turismo en Del Carmen que es la que gestiona las excursiones a la Laguna y abre a las 8:00 a.m.


El barco cuesta 1.600 Php – 29€ (Sólo hasta Sugba Lagoon), mientras que las tasas son de 100 Php (2€) por persona. Con el alquiler del bote, te dan la opción de incluir también en el tour el banco de arena de Kawhagan en su recorrido. Cuesta 400 Php (7€) adicionales por barco y una tarifa de atraque de 150 Php (3€). Sin embargo, nosotros sólo visitamos Sugba Lagoon porque, tras la excursión, Macarena tenía que ir a surfear.


El viaje en bote a la laguna lleva alrededor de 20-30 minutos y es un trayecto bonito. Comienza recorriendo los manglares de Del Carmen, de los que dicen están llenos de cocodrilos de agua salada. Incluso hay un esqueleto de cocodrilo de agua salada en el centro turístico en el que se paga la tarifa de entrada.


Además, se atraviesan bellos bosques de palmeras a la orilla del mar y las costas de la isla de Laonan, en la que vive una pequeña comunidad de filipinos en casas flotantes dedicados a la pesca. Una vida dura, desde luego, pero en un lugar inigualable.


La llegada a la laguna se advierte por los carteles que lo indican y por su distinguible cabaña flotante de dos pisos.


Cómo es la Laguna


El bote te deja en la cabaña flotante y son alrededor de tres horas las que se puede permanecer en el lugar porque, como la plataforma es pequeña y se llena, es necesario que los visitantes vayan rotando.


La cabaña es un sitio atestado de gente y muy ruidoso en el que se pueden alquilar una mesa y un par de sillas -éstas con suerte- por 50 Php para dejar las cosas, aunque realmente no creo que sea muy seguro dejar ahí las cosas desatendidas, sobre todo, si llevas equipos de fotografía o el teléfono móvil.


En Sugba Laoon se puede practicar paddle surf (300 Php/h – 5,50€), alquilar una balsa de bambú (300 Php/h), un Kayak (300 Php/h) o hacer snórquel en sus aguas transparentes, aunque el fondo no es precisamente lo mejor de este sitio. Pero, sin duda alguna, la atracción estrella de este lugar es su trampolín de madera situado a 3 metros sobre el agua.


En él, el ángulo perfecto te permite obtener una instantánea de un lugar auténtico y solitario en el que se puede saltar desde una plataforma semiabandonada sobre unas increíbles aguas de color turquesa. Pero, claro, ésta es la realidad de instagram porque lo que la verdad esconde es un lugar atestado de extranjeros que hacen cola para saltar desde el trampolín y conseguir la tan ansiada instantánea.


Excursión a la isla Kawhagan
Si vais a ir hasta la isla Kawhagan, hay que navegar 20 minutos desde Sugba Lagoon. El banco de arena blanca de la isla de Kawhagan queda expuesto en marea baja y hay una pequeña cabaña de madera. También hay un pequeño restaurante local en la isla que vende platos filipinos tradicionales como el adobo de cerdo y el pescado a la parrilla por 350 Php (6€). También se pueden comprar bebidas y aperitivos.


Además, se hace otra parada en la isla de Pamomoan, que se abrió en octubre de 2019 al público.


La visita a Sugba Lagoon fue un poco agobiante con tanta gente, pese a que habíamos partido nada más abrir la oficina, así que calculo que no estuvimos allí más de una hora hasta que decidimos volver a Del Carmen, donde vimos un singular vía crucis en la iglesia local y disfrutamos de las estampas de los niños en el muelle.


El camino de vuelta hasta General Luna fue un auténtico placer, como ocurrió en las carreteras de Siargao cuando fuimos a las piscinas naturales de Magpunpungko.


Y el resto del día, tocó surfear, como Dios manda.
20 comentarios
Han tenido mucha suerte de poder hacer este viaje y disfrutarlo tanto.
Como decíamos en la entrada anterior, hay muchos lugares que resultan paradisíacos visitarlos en solitario pero que siempre están atestados de turistas. Sucede en todos lados.
Lo importante, constato una vez más, es lo bien que os lo montáis a la hora de viajar. Y la manera en que aprovechan los tiempos y los gustos de cada uno.
Gracias por compartir las fotos y por toda la información que nos proporcionas.
Un beso grande.
En esta ocasión, Nélida, no disfruté tanto. Me pareció que había demasiada gente y realmente no lo esperaba; pero es una experiencia más y que debe valorarse ¡Sería injusto no hacerlo!
Muchas gracias siempre por tus comentarios.
Un besazo
Para que no te salga la foto dichosa y tengas que hacer cola de nuevo jajaja lo que hace instagram ehhh.. La verdad es que el sitio se ve precioso, pero también se ve lleno, eso sí, los paisajes lo valen. Qué bonito me parece todo con esos colores. Lo bien que se lo tiene que pasar Macarena en estos viajes, no para, qué de actividades hace. Un beso.
A ver, a ver. Ya no sólo eso: es que no es lo mismo tirarse con el pelo seco o mojado ¡Eso dice Macarena! Jajajajajajaja Pero ahí estuvimos rápido con el disparador continuo. Yo… no tengo mucha paciencia para esas cosas.
Pero, sí, era un sitio precioso.
Un besazo
Muchas gracias una vez más, querida amiga Macarena, por ofrecernos una completísima información con ambas rutas turísticas, medios de transporte, precios y tasas para viajar dentro del archipíelago de Filipinas a estos dos singulares parajes de belleza natural, como la laguna de la remota isla de Caob llamada Sugba Lagoon y la de la isla de Kawhagan con un exotismo muy particular, junto al estupendo reportaje fotográfico que lo acompaña.
Los manglares, las formaciones kársticas y el color turquesa de sus aguas me han dejado maravillada.
Un besazo y feliz martes!!! 😉
El lugar era de foto, Estrella, pero para mi gusto tanta gente le restaba encanto. Aún así hay que estar agradecido por haber podido disfrutar de lugares como éste.
Un beso.
Pero, qué bonito!!! No me extraña que sea tan fotografiado.
Lo malo, las aglomeraciones que tanto me molestan.
Muchos besos, Macarena.
No nos queda más remedio que compartir el mundo, Carmen jjjjjjjjjj
Un beso
Muy bonito Macarena, otra vez me sorprendes con Filipinas.
Ir a Sugba Lagoon es una de esas excursiones que todo turista tiene que hacer, pero creo que limitar la estancia a una sola plataforma tiene que ser un poco agobiante…. entiendo que ese es el encanto, pero si se llena de gente ese encanto se pierde. No obstante yo iría y sacaría fotos a mi peque tirándose desde el trampolín, jajaja turistada total 😉
Y la isla Kawhagan me ha parecido muy bonita. Una gran opción para combinar con Sugba Lagoon.
Un abrazote
Alicia
Pues eso es lo que hicimos nosotros más o menos jjjjjjjj Ya cuando nos comenzamos a agobiar… nos fuimos de allí.
Un fuerte abrazo!!!!
No me extraña que sea uno de los lugares más fotografiados, por las fotos veo que es precioso. Ideala para perderse unos días por el. Un beso y feliz noche Macarena ???
¡Quién pudiera ahora! ¿Verdad? Un beso, Vicenta.
Excursiones y lugares preciosos y exóticos sin duda. Y como sesirtirse la atracción de la isla.
Hala esperar la cola de rigor que la foto si vas allí hay que traerla :))
Me encanta la foto 16 y vuestra niña. Vaya señorita guapa.
Buen jueves. Cuidaros.
Un abrazo.
Muchas gracias, Laura. Macarena es verdad que está creciendo ya y es toda una mujer. Y la excursión… estuvo chula.
Un abrazo. Lo mismo os digo.
Es cierto que todos tenemos derecho a disfrutar de las cosas,… pero es una pena que seamos tan «generosos» cuando calculamos la capacidad de carga de un lugar no?,… es cierto que el uso público del medio natural es lícito y además necesario,… pero es que a veces «sobamos» tanto e medio natural…
Muy hermoso el lugar Macarena,… y fíjate que me gustó especialmente ese camino de vuelta…
Buen fin de semana!
Completamente de acuerdo contigo. Además, es una pena, pues luego damos lugar al cierre de lugares increíbles como ha pasado en Tailandia, por ejemplo. Aun así, Norte, ves que la intención está ahí con las restricciones al uso de plásticos y tabaco; pero este es el gran dilema de los países en vías de desarrollo.
Respecto al camino de vuela, Norte, además nos pusimos morados de cocos, de los que habían caído de los árboles jejejejejeje
Un abrazo!!!!
¡Hola, Macarena! Con esta entrada nos muestras el contraste entre lo que se «vende» en las redes y la realidad. Como dices, seleccionando según qué fotos podemos pensar en este lugar como un paraíso virgen en el que los visitantes parecen aventureros. Luego está la cara B, que es un recinto muy pero que muy turístico y atestado de gente. Desde luego que el artículo no puede ser más fidedigno con la realidad.
Un fuerte abrazo!!
Sabes, David, que yo trato de contar la realidad que nosotros nos hemos llevado unos chascos…
Abrazos!!!!
que lugares mas bonitos nos enseñas, es precioso.
Muchas gracias ¡Un saludo!