La Ciudad Cueva de Vardzia se encuentra al Oeste de Tbilisi y es uno de los tres yacimientos rupestres de mayor importancia en Georgia, junto a la Ciudad Cueva de Uplistsikhe y el Monasterio de David Gareja.
Vardzia se encuentra muy cerca de la frontera con Turquía y para llegar hasta allí, hay que tomar la ruta Tiflis – Mtskheta – Gori – Borjomi – Akhaltsikhe – Varzdia. En realidad, hay una ruta más directa saliendo de la capital de Georgia hacia el Oeste, pero el estado de las carreteras desaconsejan recorrer ese camino, que haría incluso más largo el trayecto.
Nosotros llegamos a Vardzia procedentes de Kutaisi, hasta donde habíamos llegado para ver la Catedral de Bagrati y los Monasterios de Gelati y Motsameta. Y a la vuelta, nos detuvimos a dormir en la ciudad balneario de Borjomi.
Desde Tiblisi se ofrecen tours para visitar la Ciudad Cueva de Vardzia, pero lleva más de 4 horas y media realizar cada uno de los trayectos, por lo que desde luego, no me parece nada recomendable hacer esta ruta en un solo día.
Explorando la Antigua Maravilla de Vardzia: Un Viaje a la Historia y la Belleza
El mundo está repleto de tesoros históricos y culturales que aguardan ser descubiertos por los viajeros. Entre estos tesoros, se encuentra la antigua maravilla de Vardzia, un sitio arqueológico único ubicado en las pintorescas tierras de Georgia. Vardzia es mucho más que un destino turístico; es un portal a la historia, un recordatorio de la destreza humana y un testimonio de la devoción espiritual que ha perdurado a lo largo de los siglos.
Pero Vardzia es también uno de esos lugares que merecen la pena conocer por su exclusividad. Porque salvo parecidos razonables en Irán y Turquía, no encontrarás otro lugar igual: un hormiguero humano que ha resistido el paso de los siglos para que pueda ser contemplado.
Un Vistazo a Vardzia: Orígenes y Significado
Situado en la región de Samtskhe-Javakheti en Georgia, Vardzia es un complejo monástico excavado en la roca que se extiende a lo largo de la empinada ladera de un cañón. Su historia se remonta al siglo XII, cuando el Rey Jorge III y su hija, la que fue la reina Tamar de Georgia, ordenó la construcción de esta asombrosa maravilla para proteger la frontera Sur de Georgia de las invasiones del Imperio Mongol.
Cuando Tamar ascendió al trono en 1184, se convirtió en la primera reina gobernante de Georgia. Su reinado es considerado una de las épocas doradas de la historia del país. Tamar demostró ser una líder excepcional, capaz de tomar decisiones sabias y valientes.
El plan era perfecto. Se excavó una ciudad subterránea a la que se accedía a través de un túnel secreto que nacía en el río Mktvari. La ciudad, con 13 niveles y más de 600 estancias, estaba completamente oculta en el interior de la montaña a los ojos del invasor. Además, era completamente autosuficiente: un manantial y unas canalizaciones abastecían la ciudad de agua potable; mientras un sistema de cultivos en terrazas, le proporcionaba alimento.
Pero en 1283, la zona sufrió un devastador terremoto y gran parte de la montaña se desprendió, dejando al descubierto la ciudad que así perdió su funcionalidad estratégica.
En el siglo XIII, Vardzia sufrió una invasión mongola, donde fueron derrotados por Irán para luego caer bajo el yugo de Turquía durante los siglos XIV y XVII. La ciudad fue arrasada.
En 1828 Dzavakhetia fue liberada por los rusos y Vardzia volvió a la vida. Pero durante la sovietización de los países satélites de la Unión Soviética, la actividad religiosa cesó y sólo puedo retomarse a partir de la década de los 80; fecha en la que se reanudó la vida monástica en la ciudad cueva.
Hoy día es más un yacimiento arqueológico que un monasterio, sin embargo, la existencia de los recintos religiosos de Vardzia han hecho perdurar la presencia de una comunidad monacal que custodia los lugares de la ciudad cueva.
La Arquitectura Sorprendente: Un Legado Tallado en Piedra
Lo que hace que Vardzia sea verdaderamente excepcional es su arquitectura tallada en la roca. A lo largo de los años, los monjes y artesanos labraron pasadizos intrincados, habitaciones, capillas, bodegas e incluso sistemas de riego. La habilidad y el esfuerzo requeridos para crear este sitio son asombrosos y se convierten en un testimonio duradero de la capacidad humana para adaptar el entorno a sus necesidades.
Viaje en el Tiempo: Experiencia del Visitante en Vardzia
Después de dejar el coche en el aparcamiento (gratuito) se ofrece en la taquilla la posibilidad de subir hasta la ciudad andando (gratis) o en un pequeño microbús que cuesta 4 GEL (1,50€). Porque la ciudad se visita de arriba hacia abajo. Es decir, el autobús te deja en la parte alta e indicado, con más o menos precisión, el visitante va recorriendo los diferentes puntos de interés, hasta que finaliza bajando hasta el punto de inicio por una escalera interminable excavada en el interior de la montaña.
En realidad, todo resulta interesante: las estancias, los pasadizos, las tallas en las cuevas; pero como curiosidad, destacan los siguientes lugares:
La Iglesia de la Dormición, a la que hay que entrar con el cabello cubierto, y donde destacan los frescos del Rey Jorge III y la Reina Tamar (No se pueden hacer fotos).
El Campanario y los frescos exteriores de la galería que hay entre la Iglesia y el Campanario. Lugar que por cierto destaca por sus arcadas visibles desde la mayor parte de la ciudad.
La capilla monolítica que hay en el interior de las cuevas.
El manantial de la ciudad, conocido con el nombre de “Las lágrimas de Tamar”, que abastecía de agua el complejo y cuyas aguas se suponen curativas. Se encuentra protegido por un cristal. Además, en algunas galerías y estancias, se pueden observar canalizaciones y lugares para almacenar el agua.
La botica de la ciudad que, aunque se halla en un lugar elevado e inaccesible, deja entrever las estanterías de piedra para colocar los diferentes productos curativos de la época.
Las bodegas, en donde quedan aún restos de ánforas y vasijas para el almacenamiento del vino.
Los agujeros de las estancias usados para almacenar el agua o hacer fuego.
El dormitorio de la Reina Tamar. Aunque dice la leyenda que la Reina Tamar nunca dormía en la misma estancia para evitar ser localizada por los enemigos, casi al final de la visita se encuentra una cueva de doble nivel en la que se sube a la parte superior a través de una escalera de madera. En este lugar, es dónde se dice que se encontraban los aposentos de la reina. Y lo cierto es que su arquitectura es diferente y mucho más refinada que la del resto de las habitaciones.
La visita viene a durar unas dos horas y no es apta para personas con movilidad reducida.
Horarios y Precios para visitar la Ciudad Cueva de Vardzia
Horario de visita
Del 1 de marzo al 1 de mayo: de 10 a. m. a 6 p. m.
Desde 1 de mayo al 1 de octubre: de 10 a. m. a 7 p. m.
Del 1 de octubre al 15 de noviembre: de 10 a. m. a 6 p. m.
Desde 15 de noviembre al 1 de marzo: de 10 a. m. a 5 p. m.
Precio de las entradas
La entrada cuesta 15 GEL (5€) y los menores de 6 años entran gratis, así como las personas con capacidades especiales y sus acompañantes.
Una audioguía cuesta 15 GEL y si se quiere contratar un guía, hay que pagar 45 GEL (15€).
Atracciones cercanas a Vardzia y con las que combinar la visita
Como a la ida no quisimos entretenernos para que no se nos hiciera muy tarde, ya que como contamos pinchamos la rueda en Kutaisi, una vez finalizada la visita a la Ciudad Cueva de Vardzia, nos detuvimos en dos lugares muy cercanos que pillan de paso y que merecen la pena conocer.
El Castillo Hkertvisi
Se alza sobre un peñasco y aunque bastante deteriorado, se trata de una de las fortalezas más antiguas de Georgia. Según la leyenda, el castillo Khertvisi fue destruido por Alejandro Magno.
No hay que pagar entrada, pero lo cierto es que no merece mucho la pena.
La Fortaleza de Rabati
Por otra parte, en la cercana ciudad de Akhaltsikhe se encuentra la peculiar Fortaleza de Rabati, un lugar muy peculiar, en cuyo interior se encuentran una Iglesia, una mezquita y una sinagoga, además de estanques, jardines y una castillo. Pero hablaremos de todo ello en la siguiente entrada.
La Ciudad Balneario de Borjomi
Terminamos el día en la ciudad Balneario de Borjomi, atravesada por un río y con un centro muy pequeñito.
La ciudad es conocida por ser el resort climático más importante de Georgia y por el agua de Borjomi, que embotellada, es una de las más famosas en países de la antigua URSS.
Poco pudimos hacer aquí, bajo una lluvia que nos recibió sorpresivamente. No obstante y a pesar de su parquecito, sus hoteles balneario y la casa de Mirza-Riza-Khan, la más emblemática de la ciudad, poco interés despertó en nosotros esta pequeña población a la que acude el turismo nacional para disfrutar de sus aguas termales.
6 comentarios
Precioso Macarena. Me ha parecido un lugar único, de esos que uno guarda con la esperanza de ir algún día. Ya me dijiste que Georgia me iba a gustar, y así ha sido. Ahora solo tengo que convencer a Chema que últimamente está muy reticente para viajar a países de este estilo jajajaja
Un abrazo,
Verás como le gusta, de verdad. Además, este país es un híbrido entre Europa y Asia, así que igual puedes convencerlo.
Este lugar es una auténtica pasada porque lo recorres en gran parte por el interior de la montaña. Imagina cuando ninguna de sus estancias estaban expuestas a la luz. Tuvo que ser difícil vivir allí y, sin embargo, es real y durante años sus habitantes se acostumbraron a estas circunstancias.
Un fuerte abrazo, Alicia.
Me ha encantado, Macarena.
Increíble esos túneles que conectaban la ciudad, y cómo idearon los habitáculos para no estar a la vista de los invasores.
Debe ser muy especial estar ahí en persona, recorrer parte de esos pasadizos, ser testigo de -como dijiste- estar ante «un viaje a la Historia y a la Belleza».
Un lugar alucinante, sin duda.
Mil gracias por compartirlo con nosotros.
Un beso grande!!!
Yo en este lugar aluciné, pero de verdad. Está algo alejado, lo que permite visitarlo casi en soledad y, como bien dices, te hace transportarte en el tiempo e imaginar cosas del pasado.
Desde luego que recomiendo este lugar tan especial y único.
Un besazo!!!
¡Precioso!. Muchas gracias por la explicación tan detallada, no solo de este lugar sino también de las demás zonas que recorristes en Georgia.
¡Un saludo muy cordial!.
Ohhhh ¡Muchas gracias!
Un abrazo