Singapur era uno de los pocos países que, tras algunos viajes a Asia, aún no habíamos visitado. La creencia en que la visita superaría lo que nuestro bolsillo podría soportar y las abundantes restricciones para los fumadores, habían provocado nuestra pérdida de interés en el país más pequeño del Sudeste Asiático. Pero como todo viajero sabe, los prejuicios no son más que opiniones negativas. Así que venciendo todos ellos, decidimos visitar Singapur para terminar dándonos cuenta de que no era tan fiero el león como lo habían pintado.
Elegimos cuidadosamente nuestro hotel bajo las condiciones de que fuera relativamente céntrico; que estuviera ubicado junto a una estación de metro; que tuviera piscina y, por supuesto, que no fuera muy caro.


Realizamos nuestra reserva para 3 noches (4 días) en el Hotel Robertson Quay, al lado de Fort Canning Park y Clarke Quay, y muy cerca de Orchad Road, Kampong Glam y Chinatown.


Las habitaciones eran realmente pequeñas, el aire acondicionado estaba a máxima potencia y el desayuno no era el mejor del mundo; pero salvando esos pequeños inconvenientes, puedo recomendarlo. Pagamos por las tres noches 564.96 SGD (350€), lo que no viene a ser del todo caro tratándose de Singapur.


Antes de viajar, barajamos las posibilidades que había respecto a los abonos de transporte, pero se dio la circunstancia de que terminamos por no utilizarnos, quiero decir, que no compramos ninguno porque recorrimos la ciudad a pie.


Parecerá una locura para quien haya visitado Singapur, pero se dio la circunstancia de que comenzamos por recorrer los lugares más cercanos al hotel (Kampong Glam y Bugis) que resultaban ser cercanos a otros sitios turísticos (Little India) y, como se suele decir, “una cosa llevó a la otra” y terminamos por recorrer Singapur a pie, tomando únicamente el metro cuando tuvimos que ir al aeropuerto.
Ocurrió además, que los días anteriores a nuestra llegada había llovido copiosamente, por lo que encontramos una temperatura más que agradable y bastante distante del calor y la humedad tan característicos de la ciudad.


El día de nuestra llegada fue únicamente de toma de contacto con la ciudad ya que veníamos cansados de Kuala Lumpur. La siguiente jornada, empleamos el día para visitar Kampong Glam, Bugis y Little India por la mañana, y Marina Bay por la tarde. El tercer día, visitamos Chinatown y Gardens by the Bay. Mientras que el último día, volvimos a pasear por lugares que ya habíamos visitado con anterioridad.


La política de segregación racial instaurada por el gobierno colonial de Singapur dio lugar a la construcción de diferentes barrios que albergaban distintas comunidades religiosas. Estos barrios se siguen manteniendo a día de hoy y han terminado por conformar el atractivo puzle de tradición y modernidad que atrae a propios y extraños y hace de Singapur un lugar único en el mundo.
Kampong Glam
Kampong Glam es el barrio musulmán de Singapur y se trata de una de las primeras zonas habitadas de la ciudad.


Se trata de un barrio muy agradable con calles peatonales, lleno de tiendecitas, restaurantes libaneses y turcos y muchas tiendas de artesanía, así como bares con encanto. Fue una de las más gratas sorpresas en nuestra visita a la ciudad porque no son muchos los que dan detalles de este lugar y realmente se muestra como un imprescindible en la visita a Singapur.


Entre los lugares más señalados se encuentran:
La Mezquita del Sultán: Construida en 1924 por Denis Santry, de la que dicen es la más bella de Singapur y la mayor en importancia para la comunidad musulmana de la capital. Se puede acceder a su interior de 9:00 a 13:00 y de 14:00 a 16:00 horas (viernes de 14:30 a 16:00 horas).


Palacio del Sultán: Construido en 1840 por el Sultán Ali, está situado en Kandahar Street. Cerca se encuentra la Puerta del Sultán, una casa amarilla donde residía el primer ministro.
Bussorah Mall: Es una calle peatonal llena de cafeterías y restaurantes.


Arab Street: Esta calle se encuentra llena de tiendecitas de telas, alfombras y perfumes, así que puede ser que sea la que más representa la esencia del mundo árabe.
Haji Lane: es la calle más estrecha de toda Singapur y puede que la más bohemia y alternativa. Sus paredes se encuentran decoradas con murales de vivos colores y sus tiendas ofrecen artesanías y productos hechos, en su mayoría, a mano por artesanos locales.


Bugis
Bugis es el distrito comercial más grande de la ciudad.
El origen de esta zona se remonta a 1950, cuando era lugar de reunión nocturna para travestis y transexuales, lo que la convirtió en una parada ineludible para el turismo sexual del Sudeste Asiático. En 1980, sin embargo, se llevó a cabo una remodelación de la zona para terminar convirtiéndola en un distrito comercial.


Se trata de la principal área comercial para los habitantes de la capital, por lo que es más fácil para el turista encontrar productos asequibles, aunque también hay tiendas de marcas de altos precios.


Por el día, destaca el complejo comercial de Bugis Junction, en el que encontrarás de todo; mientras que por la noche, el popular night market de Bugis Street atrae a cientos de personas a los puestos de comida barata, objetos de artesanía y piezas de colección.
Siempre encontrarás ambiente en este barrio.
Little India
Little India es el colorido barrio indio de Singapur y, aunque los indios aportan el sello inconfundible a la zona, ésta aglutina otras influencias asiáticas y de ahí que también se puedan encontrar edificios de estilo chino u occidental, así como iglesias o mezquitas.


Abundan los pasajes de shophouses tradicionales en las que encontrar telas para saris, latón, guirnaldas, música y joyas muy al gusto hindú.


Entre sus lugares de interés se encuentran:


El Templo de Sri Veeramakaliamman, dedicado a la diosa hindú Kali, está construido al estilo de los templos tamil del sur de la India. Se encuentra en la avenida principal de Little India, Serangoon Road, no muy lejos del resto de atracciones principales del barrio y abre todos los días (cierra de 12:30 a 16:00 horas). La entrada es libre y hay que descalzarse para acceder al interior.


Templo taoísta de Leong San: Traducido como Templo de la Puerta del Dragón de la Montaña, es uno de los más antiguos de Singapur y está dedicado a la diosa Kuan Yin.
Mezquita Abdul Gafoor: Esta mezquita de estilo indio-sarraceno y es Monumento Nacional. El edificio se encuentra adornado por lunas y estrellas y posee una cúpula hexagonal. La entrada principal está decorada por un reloj solar único en el mundo islámico. Se puede visitar de sábados a jueves en horario de 9:00 a 12:30 y de 14:30 a 17:00 horas; mientras que los viernes, el horario es de 9:00 a 11:00 y de 15:00 a 17:00 horas.


Little India Arcade: Ocupando un edificio construído en la década de los 20, el pequeño centro comercial Little India Arcade está lleno de pequeñas tiendas que venden productos típicos. Su clientela está formada principalmente por turistas, pero merece la pena participar de su ambiente único. Abre todos los días de 9:00 a 22:00 horas.


House of Tan Teng Niah: Aunque no se visita por dentro, esta casa es uno de los lugares emblemáticos de Little India por su arquitectura y especial colorido. Se trata de un edificio histórico construído en 1900 levantado para la mujer de Tan Teng Niah, un destacado comerciante chino propietario de varios negocios en la zona de Serangoon Road. Se encuentra en Kerbau Road.


Chinatown
Como su nombre indica, es el barrio central de la comunidad china de Singapur con más de 1.200 edificios históricos.


El barrio posee cinco distritos: Kreta Ayer, Telok Ayer, Tanjong Pajar y Bukit Pasoh.


La calle más famosa del Barrio Chino es Pagoda Street, llena de puestos típicos y souvenirs de Singapur. Y desde esta calle, que se puede tomar como punto de partida, se pueden visitar otros muchos lugares de interés.


Lugares para no perderse en Chinatown:
El Templo de la Reliquia del Diente de Buda era una de nuestras visitas más esperadas tras haber visitado otro templo del mismo nombre y con el mismo fin en la ciudad de Kandy (Sri Lanka).


El templo es bastante reciente, ya que fue finalizado en 2007, pero posee una arquitectura imponente que se alza en pleno corazón del Barrio Chino.


Se puede acceder a su interior todos los días de 9:00 a 17:00 horas y, con suerte, podrás asistir a una ceremonia budista, como fue el caso durante nuestra visita. También se puede acceder a los pisos superiores, en donde se albergan piezas únicas expuestas, algunas de las cuales son reliquias, dicen que originales, pertenecientes al mismo Buda. Los sábados se organizan visitas guiadas con los voluntarios del templo.
La Mezquita Jamae fue la primera de Singapur y ha sido declarada monumento Nacional. Construída en 1825, destaca por los minaretes octogonales de su fachada coronados por sendas cúpulas.


Templo de Sri Mariamman: Es el templo hindú más visitado y el más antiguo de Singapur. Se puede visitar su interior todos los días de manera gratuita.


Nagore Durgha: Este edificio de arquitectura única alberga el Centro del Patrimonio Musulmán Indio. Fue construido originariamente como santuario por musulmanes del sur de la India. Merece la pena visitarlo, al menos para ver su fachada, única en su estilo en toda la ciudad. Abre los días laborables de 10:00 a 17:30 horas y los sábados de 9:00 a 13:00 horas


Templo de Thian Hock Keng: Es un templo chino, también de los más antiguos de Singapur, al que acudían los marineros que acababan de llegar a Singapur a dar gracias a la dios del mar Ma Zu por haber sobrevivido a larga navegación.


El templo sigue el estilo tradicional de la arquitectura del sur de China y fue levantado sin usar un solo clavo. Es curioso pensar que, además, este templo estaba ubicado frente al mar. Así que todo lo que hay ahora construido desde allí hasta Marina Bay es terreno ganado al mar.
Shophouses de Chinatown
Al igual que ocurre en las ciudades históricas de Malasia, una de las formas más populares de la arquitectura singapurense son las shophouses.


Una shophouse es una estrecha casa de dos pisos con un corredor y un vestíbulo cubierto para peatones –llamado camino de cinco pies-. Tienen patios internos, escaleras abiertas y tragaluces para llevar la luz y el aire a interiores que de otro modo serían oscuros y estrechos.
Las shophouses poseen diferentes influencias arquitectónicas dependiendo de cuándo se construyeron: Las primeras poseen menos ornamentación que las de la segunda época, cuyo estilo se denominó “de transición”, para pasar a la rica arquitectura del período Art Decó.


Existe el enfoque minimalista, adoptado en el estilo temprano con poca o ninguna ornamentación, la austeridad del segundo estilo de transición y la modernidad del período Art Decó, que evitó los ricos detalles y mosaicos en lugar de elegantes columnas y arcos. Es el estilo tardío el que más llama la atención por sus colores y mosaicos, así como por la mezcla de elementos chinos, malayos y europeos.


Pese a que Clarke Quay, Joo Chiat y Emerald Hill dan buena cuenta de esta arquitectura histórica, es aquí, en Chinatown donde las casas destacan en su máximo esplendor dada su concentración y el buen estado de conservación –o restauración- de las mismas. Hay que pensar que en una ciudad en el que el terreno de construcción se ha convertido en un auténtico lujo, haber conservado estas pequeñas obras de arte de la arquitectura es todo un privilegio para los que contemplamos curiosos la historia y las tradiciones de los lugares que visitamos.


Asimismo, existe una ruta cultural para las shophouses de Chinatown donde puede aprenderse muchísimo acerca de su arquitectura, su historia y la variedad de estilos que fueron adquiriendo con el paso de los años.
Orchad Road
Es la calle comercial más importante de Singapur. Además acoge los hoteles más exclusivos y la residencia del Presidente del País.


Recorrer Orchad Road es imprescindible cuando se visita Singapur para impregnarse del ambiente de la ciudad que aglutina en esta calle las idas y venidas de miles de singapurenses realizando una de las actividades que más les gustan: gastar hasta el último dólar de su billetera.
El nombre de la calle se debe a la plantación de orquídeas que originariamente hubo en este lugar hasta principios del siglo XX.
Clarke Quay


Es hoy una zona restaurada de antiguos almacenes que cuenta con restaurantes, lugares de entretenimiento y tiendas.
Antiguamente fue un muelle ubicado algo más arriba de la desembocadura del río Singapur.


Además, desde Clark Quay – hay más embarcaderos- se pueden realizar pequeños paseos en barca por el río pasando por algunas de las zonas más vibrantes y coloridas de la capital.


El horario de estos mini cruceros va desde las 9:00 a.m. a las 22:00 horas, dura unos 40 minutos y cuesta 25$, pero lo mejor es hacerlo al atardecer para poder coincidir con la iluminación de la ciudad y el espectáculo de luz y sonido de Marina Bay Sand, aunque en este caso los precios se elevan hasta 38 $.


Para más información sobre los cruceros, puedes ver la web de River Cruise Singapur.
Raffles Place
Raffles Place es el distrito financiero y el lugar en el que se encuentran los rascacielos más imponentes del Singapur.


Ubicada al sur del Río Singapur, esta zona, en su origen pantanosa y con una colina, fue aplanada por prisioneros indios que utilizaron la tierra para dar consistencia al terreno, convirtiéndose en la principal área comercial de la ciudad a principios del siglo XIX.


Durante la Segunda Guerra Mundial, los japoneses hicieron de Raffles Place su primer objetivo de destrucción, tras lo cual, los pequeños comerciantes comenzaron a trasladarse a otras zonas y se comenzó la construcción de los altos edificios que hoy la ocupan.
Marina Bay
Justo a las afueras de Raffles Place se encuentra Marina Bay.
Marina Bay es una bahía artificial formada por tierras recuperadas al mar. Ahora, la desembocadura del río Singapur se encuentra aquí en lugar de junto al mar.
Puede que Marina Bay sea la zona más icónica de Singapur y la que le ha dado su imagen más internacional tras la construcción de Marina Sands y Gardens by the Bay.


Además, el área que alberga el Merlion – escultura símbolo de Singapur-, Singapur Flyer – una noria de 165 metros de altura-, el Teatro Esplanade, el Art Science Museum y decenas de lugares chic y caros en los que cenar.
Merlion


El Merlion es una criatura mítica con cabeza de león y cola de pez.
La cabeza de león representa al león que descubrió el príncipe Sang Nila Utama cuando re-descubrió Singapur en el siglo XI. La cola de pez representa el pasado pesquero de la ciudad, cuando aún se conocía como Temasek.
Cuando Sang Nila llegó a Singapur cambió el nombre de Temasek por Singapura (Ciudad León, «singa» significa león y «pura» ciudad).
El conocido Merlion de Singapur se encuentra en Merlion Park, en Marina Bay. Posee una altura de 8,6 metros y un peso de 70 toneladas.
Hoy el Merlion atrae a más de un millón de visitantes al año.
Hay cinco estatuas oficiales de Merlion en Singapur:
Dos en Merlion Park, junto al Centro Comercial a One Fullerton.
Uno en la isla Sentosa
Otro en Mount Faber y
Un último en la sede de la Junta de Turismo de Singapur en Orchard Spring Lane.
Marina Bay Sands
Es un conjunto de hoteles y casino ubicado en la Bahía de Singapur que se ha convertido en uno de los edificios icónicos de Singapur por su peculiar estructura de tres torres con una piscina infinita en forma de barca en la parte superior de los rascacielos.


El precio mínimo de una de sus habitaciones para pasar la noche ronda los 300€, aunque también es posible acceder a la piscina, previo pago de su importe, o a cualquiera de sus restaurantes.


No obstante, si tu bolsillo prefiere emplear ese dinero en otro viaje –porque lo que cuesta te da para una pequeña escapada- también puedes acceder de manera gratuita al centro comercial de su interior o, incluso, a su terraza trasera para ver el espectáculo de luces y sonidos de Supertree Grove.
Espectáculo de Luz y Sonido de Marina Bay Sands
Todos los días, a las 20:00 y a las 21.30 horas se lleva a cabo un espectáculo de luces y sonido desde el Marina Bay Sands que es totalmente gratuito.


Se puede disfrutar del mismo desde el Merlion Park o cerca del Fullerton, o bien desde el otro lado de la Bahía, abajo del Centro Comercial de Marina Bay Sands.
Nosotros vimos ambos y, si hubiera que recomendar sólo uno, merece más la pena verlo desde la zona baja del Marina Bay Sands porque se oye mejor la música y porque el láser proyecta imágenes sobre las cortinas de agua que hacen de éste un espectáculo único.
Gardens by the Bay
Es una de las mayores atracciones turísticas de Singapur.
Se encuentran ubicados tras el Marina Bay Sands.


Recorrer los jardines es gratis, aunque hay que pagar para acceder a los dos invernaderos y para subir a las pasarelas de los Supertree Grove. Puedes consultar los precios en la página oficial de Gardens by the Bay.


Los jardines al aire libre están agrupados por temas: el jardín indio, el jardín malayo, el jardín chino,… Aunque la zona más espectacular y visitada es la de Supertree Grove, unos superárboles artificiales cubiertos de vegetación que recogen el agua de la lluvia y lo convierten en energía con los que iluminarse cuando cae la noche.


Todos los días, se lleva a cabo un espectáculo de luz y sonido en los árboles a las 7:45 y a las 8:45 que es una pasada. Este espectáculo también puede verse desde la pasarela trasera de Marina Sands.


Los jardines abren todos los días desde las 5:00 a.m. a 2:00 a.m. Los invernaderos y la pasarela en lo alto de los superárboles se pueden visitar de 9:00 a 21:00 horas.
Isla de Sentosa y Universal Studios
Sentosa es una pequeña isla al sur de Singapur que se utiliza como destino turístico y lugar de esparcimiento de los Singapurenses. En la isla se puede disfrutar de la playa, dos campos de golf, hoteles de cinco estrellas y el parque temático Universal Studios Singapur.
Nosotros no visitamos la isla de Sentosa, pero podemos recomendarte la página de Trotajoches en la que encontrarás un completísimo artículo que incluye informaciones sobre cómo llegar y sobre todo lo que podrás encontrarte al visitar Universal Studios.
16 comentarios
Buenos lugares para visitar:)
Son preciosos
Una guia muy completa y detallada. Me parece un viaje precioso, tiene lugares muy intereantes para ver. Un beso y feliz noche Macarena ❤️❤️❤
Me alegro que te haya gustado. Muchas gracias por tus palabras. Un beso
La próxima vez que visite Singapur quiero hacerlo como vosotros, a pie. Como bien dices, parece una locura, pero es la mejor forma de ver a fondo todo y creo que Singapur lo merece. Eso sí, espero volver en otra fecha que no sea verano…que calor. Menos mal que vosotros pudisteis disfrutar de una temperatura agradable. Muy buena ruta, creo que no os habéis dejado nada importante por ver 🙂
Un abrazo
Alicia
No costó tanto, Alicia. Lo mejor que es vas parando cada dos por tres: que si un heladito, una coca-cola, ahora que me siento un poquito, ahora que entro aquí… Sí, no estuvo mal del todo.
Un abrazo
Pues al final todo salió de maravilla y además disfrutasteis de una buena temperatura. Por lo que he visto la verdad es que es un lugar que merece la pena visitar, me ha encantado la entrada, como siempre ya que detallas y explicas de maravilla todo lo que vamos a poder encontrar, tanto lo bueno como lo no tan bueno. Un abrazo
Gracias Asunción. Me ha salido una entrada un poco larga, pero creo que le servirá a los próximos visitantes de Singapur.
Un abrazo
No se si alguna vez iré allí , más bien creo que no. Pero no dudéis que si vamos sacaré una copia de aquí. Que buena guía dejas Macarena.
Lo que más me ha llamado la atención es el tempo Sri. Dios bendito la de figuras que tiene.
Buen otoño familia. Cuidaros.
Un abrazo.
Ains, desde luego, falta aún un poco para viajar a lugares tan lejanos, pero algún día llegará de nuevo un tiempo para viajar y ¿por qué no visitar Singapur?
Un gran abrazo, Laura. Os deseo también un buen comienzo de estación.
Hola, Macarena.
¡Qué entrada más completa! Muchas gracias por darnos tanta información y de manera tan detallada; con horarios, precios y muchas sugerencias. Fascinante Singapur, estoy deseando descubrirla con tus siguientes entradas porque sino me equivoco a partir de aquí las siguientes entradas va a ser un «desgranar» este sobresaliente resumen.
Me pareció todo muy interesante. Otro mundo, una cultura muy distinta a la nuestra. Me encantaría entrar dentro y ver la arquitectura de las Shophouse, nunca he visto nada parecido.
Los espectáculos nocturnos de luz y sonido se antojan muy apetecibles, y ese jardín tan curioso.
Realmente nos has pintado un viaje la mar de atractivo. Deseando recorrerlo a través de vuestra experiencia 🙂
Gracias por compartirlo.
Un beso grande.
Es una ciudad muy curiosa, Nélida, con fuertes contrastes entre la modernidad y la tradición. Entre la vanguardia y lo conservador. Además, ya lo verás, su arte urbano es increíble.
No voy a emplear tantas entradas en Singapur. Quizá en sus curiosidades y en la información principal. Pero espero que las siguientes entradas también sean de tu agrado.
Un besazo
¡Hola, Macarena! Excelente aperitivo de lo que presumo una serie llena de color. Entrada muy completa para ponernos los dientes largos en cuanto a lo que vais a descubrirnos de este maravilloso Singapur. Me encantó!
Un fuerte abrazo!
Singapur es una ciudad, sí, muy colorida y con unos contrastes increíbles. Su gran pega es que se trata de un lugar bastante caro e, imagino, que difícil para vivir. Aunque es un sitio ideal para hacer turismo.
Un fuerte abrazo.
Uf! Macarena, cuanto hay que ver y todo tiene tan buena pinta,… que abruma un poco ¿no? Además parece que todo está muy bien conservado,… creo que me gusta!,… pero creo que tengo un «pero». Se trata del Jardín de baobads que imagino están apuntalados porque son trasplantados,.. no quiero ni pensar de dónde habrán sacado esos enormes ejemplares…
Me ha encantado!
¡Eres la pera, Norte! Si es que te puede…
Pues no tengo ni idea de por qué están apuntalados, ni de donde han sacado los baobabs; pero supongo que el dinero lo puede todo ¡Vete tú a saber!
Singapur… Sí, chulo. Aunque ya sabes que yo me desenvuelvo mejor en el caos.
Un abrazo.