La Basílica de Santa Sofía no sólo ha sido un lugar de culto. Fue el corazón del Imperio Bizantino y, enclavada entre Europa y Asia, fue cruce de caminos para la cultura, la religión y el poder, convirtiéndose en el centro del mundo. Por ello, y por su peculiar arquitectura que revolucionó todos los estándares hasta su construcción, es una de las visitas más deseadas para todos los viajeros a Estambul.
La arquitectura es el testigo menos sobornable de la Historia.
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Santa Sofía se encuentra ubicada en el Barrio de Sultahnamet, en pleno corazón de Estambul, frente a la Mezquita Azul, junto al Hipódromo y muy cerca del Palacio Topkapi.
Para llegar, lo más idóneo es utilizar el servicio de la línea T1 del tranvía y parar en la estación Sultahnamet.
Horario de Santa Sofía
Santa Sofía está abierta a los visitantes todos los días, con un horario de apertura de 09:00h a 20.30h en 2024. Los viernes, el área de visitas de la mezquita está cerrada a los visitantes entre las 12:30h y las 14:30h debido a las oraciones.
¿Cuál es la mejor hora para visitar Santa Sofía?
Santa Sofía es visitada por más de seis millones y medio de personas al año, así que salvo que la visites un día lluvioso de invierno, como hicimos nosotros, lo más probable es que siempre encuentres colas –al menos eso dicen-.
Viernes, sábados y domingos son los días de la semana más concurridos, mientras que de lunes a jueves, encontrarás menos gente, si es que no es temporada alta. Las horas centrales del día son las que más visitas ocupan, por lo que visitarla a primera hora de la mañana o a última de la tarde, puede ahorrar mucho tiempo de espera.
Precio de la entrada a Santa Sofía
Nosotros visitamos la basílica de Santa Sofía los primeros días de enero de 2024, cuando aún era gratuita la entrada. Pero, a partir del 15 de enero, se impuso una entrada de 850 TL (25€), algo que me resulta realmente excesivo.
Istanbul Turist Pass incluye la entrada a la Basílica.
Código de vestimenta para visitar la Basílica de Santa Sofía
Santa Sofía es una mezquita, por lo que se requiere el código de vestimenta del resto de lugares de culto para musulmanes.
Como en el resto de mezquitas, las mujeres deben cubrirse la cabeza. Pero además, deben llevar cubiertos los hombros y las piernas.
Los visitantes sin pañuelo o ropa adecuada pueden comprar pañuelos y otras prendas en la cabina junto a la taquilla de guías.
Los hombres tampoco pueden ir en pantalón corto.
Para acceder al interior de la sala de oración es, además, necesario descalzarse (aunque por el momento, los turistas sólo visitan la galería superior y, en ese caso, no tendrán que quitarse el calzado).
Nuevas normas para visitar Santa Sofía a partir del 15 de enero de 2024
Nosotros visitamos Estambul del 8 al 15 de enero de 2024, justo antes de que entrara en vigor la nueva medida del gobierno turco que impuso el pago de 25€ para los turistas que quisieran acceder al interior de la mezquita.
Mientras que durante nuestra visita se podía acceder a la sala de oración, es decir, a la planta baja, pero no a las tribunas superiores; en la actualidad, los fieles siguen entrando por la puerta de abajo para rezar en el espacio central, pero los turistas acceden desde el lado del cercano palacio de Topkapi por un pasillo que va directamente a la galería superior de la basílica. En caso de que los fieles musulmanes quieran visitar la galería superior, deberán abonar la respectiva entrada.
Esta galería, donde se hallan numerosos mosaicos bizantinos y que permite una visión panorámica del interior del edificio, había sido vetada a las visitas desde la reciente reconversión del edificio en mezquita. Así que, en mi caso, fue algo que no vi.
La medida se presentó como un medio de racionalizar el flujo de visitantes para respetar la espiritualidad, pero lo cierto es que se estima que, desde la conversión de museo en mezquita en el año 2020, la gratuidad de las entradas para los visitantes ocasionaban unas pérdidas anuales de 50 millones de liras que el estado dejaba de embolsarse.
Así que, al tiempo que monetizan a los turistas, los fieles musulmanes conservan la entrada gratuita para el culto durante los horarios de oración designados, manteniendo la accesibilidad.
Los visitantes discapacitados no pueden subir a las galerías, así que en su caso, junto con solo un acompañante, son dirigidos a la zona principal con la asistencia de un miembro del personal del museo y pueden visitar la basílica por separado.
Los defensores de esta medida argumentan que la oración debe tener prioridad si el sitio funciona como mezquita, mientras que se puede compartir la belleza del edificio con el turismo. Al cobrar a los visitantes extranjeros, el complejo logra un equilibrio pragmático entre financiar el mantenimiento y permitir las visitas.
Por su parte y como novedad, los visitantes pueden conectarse a Internet con sus teléfonos utilizando el Wi-Fi instalado en el interior y escuchar el servicio de guía de audio escaneando los códigos QR en el tablero de información. Los turistas deben usar auriculares porque se prohíbe el uso de altavoces. Las personas que no dispongan de auriculares pueden comprarlos en las mismas taquillas de ropa (100 TL).
¿Por qué hay que visitar Santa Sofía?
La Basílica de Santa Sofía es el símbolo de la ciudad. Fue construida en el siglo VI por el emperador Justiniano y es la gran obra maestra del Arte Bizantino.
Después de ser iglesia ortodoxa y cristiana, se convirtió en mezquita, en 1453, cuando Constantinopla fue tomada por el Imperio Otomano.
Epítome de la arquitectura bizantina
Aunque por fuera parece una iglesia fortificada a base de gruesos muros y multitud de contrafuertes, su planta interior de medidas descomunales, es diáfana. Pero si algo destaca en ella es su cúpula soportada por pechinas, ejemplo mundial de utilización de este recurso constructivo.
La pechina es un componente estructural usado en arquitectura para dar sustento o aguantar una cúpula. Además de soportar la carga de la cúpula para reforzar sus bases, la pechina sirve como un elemento de unión entre dos formas geométricas: el círculo de la cúpula con el cuadrado que forma el área que queda protegido por este domo.
Es decir, la pechina permite utilizar cúpulas sobre plantas cuadradas o rectangulares. Tiene forma de triángulo invertido y cumple la función de descargar el peso de la cúpula sobre las esquinas para que se propague por la base de la construcción.
Asimismo, Santa Sofía destaca por la elegancia de sus columnas y ventanas, pero también por sus mosaicos bizantinos que representan escenas religiosas. Dichos mosaicos estuvieron una vez cubiertos de yeso, ya que el islam prohíbe las representaciones animistas. Sin embargo, a pesar de los saqueos tras la conquista de Constantinopla y las sucesivas remodelaciones de la basílica, nunca fueron destruidos. Hoy día, sin embargo, se encuentran ocultos en la sala principal tras grandes medallones con el nombre de Allah y Mahoma (p. y b.).
Fuera de la sala principal, aún se pueden ver los mosaicos de “la Majestad de Cristo”, sobre la puerta imperial, “La emperatriz y sus esposos”, La “Déesis” o “La Madre Iglesia”.
Centro del mundo
Pero más allá de su imponente arquitectura, Santa Sofía fue una vez el centro del mundo en el cruce de civilizaciones entre Europa y Asia. Situada en la que ha sido una de las ciudades más importantes de la Historia, capital de los Imperios Romano, Bizantino, Latino y Otomano.
Aunque su función era primordialmente religiosa, su estatus icónico la elevaba más allá: simbolizaba el imperio Bizantino y su poder y quienes visitaban la ciudad quedaban maravillados ante su tamaño y arquitectura. De hecho, su cúpula no fue replicada hasta 1.000 años más tarde en la Basílica de San Pablo en Roma.
Con el Imperio Otomano, fue la principal mezquita de la ciudad hasta la construcción de la Mezquita Azul, cuya edificación fue influenciada por Santa Sofía.
6 comentarios
Es uno de los lugares que me encantaría ver así que me guardo tu entrada para cuando llegue el momento. Muchas gracias y feliz finde!!!
Tienes buen gusto Asun. Es un lugar digno de visitar.
Un beso!!!
Muy buen guia para visitar la basilica. Me la guardo Macarena, que aquí puede que vaya algún día. Feliz finde 😘
Me alegro que te haya gustado. Feliz fin de semana.
La verdad es que se trata de un lugar impresionante.
Es muy bonita la Basílica, tan majestuosa, tan rica en ornamentación.
Gracias por toda la información, Macarena.
Besossss.
Es una pasada, Nélida. Aunque quizá, si mostraran a la vista todos los elementos originales… A ver, la Mezquita azul, al ser más luminosa, es casi que más bonita; pero la importancia, tanto histórica, como arquitectónica de Santa Sofía es incuestionable y no hay que perdérsela.
Muchas gracias a ti, amiga.
Un besazo