Trebinje fue nuestra última parada antes de despedir Bosnia & Herzegovina y adentrarnos en Croacia, ya que se encuentra a tan solo 24 km de Dubrovnik, ciudad donde comenzamos la ruta por los Balcanes y desde donde nos despediríamos de ellos de vuelta a España.
Lo primero que diré de Trebinje es que me causa un absoluto respeto escribir sobre la ciudad, ya que mi “seño” de inglés (y amiga) nació aquí y seguro que podrá apostillar decenas de lugares sobre los que no voy a hablar porque no los visité.
Pero lo que sí diré es que me pareció una población tranquila y encantadora que, debido a que el turismo opta por lugares cercanos y más conocidos, ha podido escapar de la masificación de visitantes que cada año merodeamos por los Balcanes. Por ello, sigue conservando la cadencia de su ritmo de vida, lo que hace de ella un lugar mucho más auténtico.
Pero como toda cara tiene su cruz, diré que las guías y los blogs parecen haberse olvidado de este lugar, que muchos consideran sólo de paso, y la información que se puede encontrar sobre la ciudad y sus alrededores es escasa, lo que desincentiva a quienes la visitamos, pensando que se trata de una población con poco o nada que ver.
Nosotros pasamos allí menos de 24 horas, pero estamos encantados de haberla podido recorrer porque realmente ofrece lugares interesantes y bellos.
Qué ver en Trebinje
La ciudad se encuentra junto al río Trebišnjica, siendo nota común de todas las poblaciones históricas y de interés en Bosnia & Herzegovina el encontrarse vinculadas al agua. De hecho, el potencial hidroeléctrico de la zona es una de las mayores fuentes de su riqueza, junto a la agricultura y a la viticultura.
Además del río lo primero que llama la atención al llegar a la ciudad son las dos colinas que se alzan sobre la ciudad coronadas por sendas iglesias.
El Monasterio de Gračanica
Hercegovačka Gračanica es el monasterio ortodoxo serbio que corona una de las colinas. Se trata en gran parte de una copia del monasterio de Grachánitsa de Kosovo, cuya construcción se completó en 2000.
Dentro, las paredes y techos están cubiertas de frescos con todo tipo de escenas de la Biblia, santos y personajes destacados de la Iglesia Ortodoxa Serbia.
En el exterior, hay una agradable cafetería y unos bellos miradores desde los que contemplar el río y los tejados de la ciudad, que se extiende más allá de lo que a primera vista pudiera parecer.
Iglesia Arhangel Mihailo
La segunda colina se halla coronada por la iglesia Iglesia Arhangel Mihailo, de nueva construcción, pero con una curiosa arquitectura. Así que merece la pena subir para, además de verla, tomar una nueva perspectiva de la ciudad con el Monasterio de Gračanica a lo lejos.
Puente otomano Arslanagić
Bajo el Monasterio de Gračanica se encuentra el puente otomano Arslanagić, construido en 1574 en un estilo muy especial del que no encontrarás otro igual. Al principio, el puente estuvo ubicado 5 km más al Este, pero en 1965 se inundó la zona para la construcción de la Planta Hidroeléctrica Trebinje I y su embalse correspondiente. Sin embargo, el puente fue trasladado a su ubicación actual por un gobierno que, acertadamente, decidió conservarlo.
Antiguos molinos de agua
Cerca del puente otomano, se pueden contemplar unos antiguos molinos de agua muy característicos de la zona.
Plaza Slobode
Ya en el centro, la Plaza Slobode es el centro neurálgico de Trebinje y en el que se pueden encontrar cafeterías y terrazas, siempre a la sombra de sus grandes árboles. Por las mañanas, hay un mercado local en el que encontrar las especialidades culinarias de la zona, como su queso kaymak, las empanadas, frutas, verduras, miel, vino y algún que otro de sus productos artesanales.
Parque Gradski
Junto a la plaza, se encuentra el Parque Gradski, en el que se levanta un Memorial dedicado a las víctimas de la Segunda Guerra Mundial, y la Catedral de la Transfiguración, un templo ortodoxo construido en 1908, con un interior lleno de frescos donde aparecen escenas de la Biblia y personajes más modernos, como Jovan Ducic o Nikola Tesla.
Trebinje Old Town
El casco antiguo de Trebinje se encuentra en el interior de un recinto amurallado junto al río. En su interior, pequeñito, se pueden encontrar murallas, puertas medievales, mezquitas, una torre del reloj y una cuidada arquitectura de casitas mantenidas con auténtica pulcritud.
Alrededores de Trebinje
Básicamente, lo más interesante en las afueras de Trebinje es el Fuerte Strac (Tvrđava Strac), una fortaleza austrohúngara abandonada y los Monasterios de Tvrdoš y Duži. Por cuestión de tiempo, de los tres lugares nosotros sólo visitamos el Monasterio de Tvrdoš, en la carretera de Stolac a Trebinje.
Monasterio de Tvrdoš
Dedicado a la Dormición de la Madre de Dios, es el monasterio de la Iglesia Ortodoxa Serbia más importante del país y uno de los monasterios más antiguos de la cristiandad. Además, es sede de la diócesis serbia de Zahumlje Herzegovina.
Fue fundado en el siglo IV y experimentó un importante auge entre los siglos XIII y XVI, pero ha sufrido un terremoto, los daños que supuso la invasión otomana y la destrucción por los venecianos en 1694; así que poco queda de aquel lugar que fue reconstruído a partir del siglo XVIII y que aún tuvo que padecer los daños de la Segunda Guerra Mundial y de la Guerra de los Balcanes.
A pesar de que todos sus iconos, imágenes y reliquias fueron trasladados a Herceg Novi, donde aún permanecen, aún alberga la reliquia de la mano de Santa Elena de Anjou, católica francesa convertida a la ortodoxia e hija del último emperador latino de Bizancio y madre de dos reyes serbios.
Además, el Monasterio forma parte de la Ruta del Vino del Mundo, siendo sus vinos uno de los de mayor fama a nivel mundial.
14 comentarios
Qué bueno que nos hayas mostrado esta ciudad y sus alrededores. Porque el hecho de que las guías turísticas no hagan especial hincapié en ellas, las convierte en verdaderos tesoros para quien llega hasta allí en un remanso de paz. Pero también está el inconveniente de que, por el mismo motivo, el resto de morrales no sepamos más de esos lugares.
Agradezco que le hayas dedicado una entrada completa. Me ha parecido precioso todo, con cosas muy interesantes que ver.
El interior de la Iglesia es muy colorida. Impresiona la reliquia de la mano de Santa Helena. Muchas guerras y destrozos han tenido que ver esos monasterios, más de una vez reconstruidos, pero me ha parecido que ahora lucen muy bien conservados.
Gracias, Macarena, hoy he viajado sin moverme de casa y gracias a ti!! , como siempre.
Muchos besos!
Lamentablemente, abandonamos ya este país, aunque he tenido una gran suerte de haberlo conocido. Me alegro que te haya gustado visitarlo con nosotros. Me ha encantado tu compañía, Nélida.
Gracias a ti. Besos
Que ciudad bonita Trebijne con sus edificios, plazas y puente. Una joyita que ojalá la den a conocer mucho más.
Es un sitio muy tranquilo y muy especial. La gente es encantadora, se come genial y se encuentra muy cerquita de Dubrovnik.
Un fuerte abrazo, amigos.
Pues que quieres que te diga, prefiero que los blogs y guías de viajes sigan sin mencionar mucho Trebinje para que podamos disfrutar de lugares con pocos turistas y gente postureando. Tiene que ser una delicia poder pasear por esta encantadora ciudad respirando el día a día de sus gentes. Y encima el lugar donde nació tu seño de inglés. Seguro que le ha hecho mucha ilusión.
Ya he visto que estás en México. Estoy deseando ver tus vídeos, esos que empiezas con tu particular «os tengo que contar una cosa». Disfrutar mucho amiga.
Querida Alicia,
Aún me queda un video más y ya he podido arreglarme el pelo jajajjajaja Espero haberte sacado una sonrisa.
Un fuerte abrazo.
Con retraso entro a leerte porque es mes lo llevo algo ajetreado.
Como bien dices es una bella ciudad, por lo menos lo que he visto me encanta. Puede ser que no esté muy bien publicitada y de ahí que pocos la conozcan. Aunque a decir verdad nunca se sabe, ya que el turismo de masas nadfa bueno suelo traer.
Hicieron muy bien conservando ese maravilloso puente.
Como siempre un placer leerte y contemplar tan buenos reportajes.
Un abrazo y buen mes de agosto.
Hola Juan!
No te preocupes por el retraso, ya ves cuándo me reincorporo yo…. Viajando, ya sabes.
Estoy totalmente de acuerdo con lo que dices respecto del turismo de masas.
Un fuerte abrazo. Muchas gracias por leerme.
Macarena, es un reportaje que no le falta de nada, la ciudad se ve muy sosegada y eso hace que se observe y se disfrute más de cada detalle y cada rincón. La mano de Santa Elena me llamo la atención, pobre da pena verla, eso es la consecuencia de la barbarie que acarean las guerras.
Gracias por este paseo virtual! Un abrazo para todos.
Trebinje es un lugar tranquilo, ideal para visitar y ya no te digo instalarse.
Gracias a ti. Un beso grande.
me encantan este tipo de ciudades tan de antes
Es un rincón ideal
Qué lugar tan bonito, espero que haya disfrutado mucho del verano y que la vuelta a la rutina no sea demasiado dura. Un besazo
Muchas gracias, Asun. Un beso enorme.