Malasia recibió más de 18 millones de turistas internacionales en 2019, aunque se ha fijado duplicar esa cifra en 2020, para alcanzar unos ingresos de 38.000 millones de euros y crear 500.000 nuevos puestos de trabajo, según los pronósticos del Plan Nacional de Transformación del Turismo, que comenzó en 2010. Pretende así situarse entre los 10 principales destinos turísticos mundiales. Aunque teniendo en cuenta que España, que es el segundo destino turístico a nivel mundial, recibió 80 millones de turistas en 2019, mucho le queda a Malasia para alcanzar esta cifra.

El problema es que Malasia es una completa desconocida y poniendo a salvo la capital, ciudades como Georgetown y Malaca, y las islas del Nordeste, son pocos los turistas occidentales que uno se encuentra recorriendo el país. Pero ¿Cuáles son sus fuertes y sus debilidades?

Lo + de Malasia

1. Malasia es un destino poco concurrido por el turismo occidental

Hay lugares muy conocidos y por ello visitados en Malasia, como es el caso que ya hemos mencionado de las ciudades de Kuala Lumpur, Georgetown, Malaca y la zona de Taman Negara en la Malasia peninsular. Además, en los últimos años, ha habido un auge del turismo en las islas del Este: Perhentians y Kapas, y en menor medida, en Redang y Tioman; pero son pocos los turistas occidentales con los que uno se cruza en sitios como Ipoh, Kuala Terengganu o Kuantan.

2. Se trata de un país muy seguro

La seguridad está garantizada en Malasia en donde es posible pasear sin miedo a hurtos o tirones, que aunque también se dan, no son comunes. Es un país ideal para viaja por libre y solo. Nunca hemos sentido sensación de inseguridad en este país.

3. El país posee infinidad de joyas ocultas

Si los lugares más concurridos por el turismo son espectaculares: Las Petronas en Kuala Lumpur, Kek Lok Si Temple o el Arte Urbano de Penang o Dutch Square en Malaca; prepárate para visitar Kellie´s Castle o los Templos Cuevas de Ipoh, Colmar Tropicale o las bellas aguas transparentes de la isla de Tioman; los callejones del Barrio Chino de Kuala Terengganu o el pueblo minero de Sungai Lembing. No hay Estado en Malasia que no posea una atracción distinta y diferente.

4. Es muy fácil desplazarse en Malasia

Todas las ciudades de Malasia están perfectamente comunicadas y, además, es posible emplear medios de transporte alternativos: avión, tren, autobús para todas las necesidades y para todos los bolsillos.

5. Se trata de un destino muy barato para viajar con todas las comodidades

Malasia es sin duda un destino barato: el alojamiento lo es, el transporte también, lo es la comida, en definitiva, podrás organizar una buena ruta sin tener que gastar una fortuna.

6. El inglés es uno de sus idiomas oficiales, así que es fácil comunicarse

Aunque es algo más difícil comunicarse en las pequeñas poblaciones de Borneo, en la Malasia peninsular todo el mundo habla inglés y es facilísimo comunicarse.

7. El malasio es una persona tolerante y respetuosa

Puede que debido al sincretismo cultural existente en Malasia, el malasio es un pueblo hospitalario, tolerante y respetuoso con el extranjero. Aunque, si tuviera que puntualizar algo, quizá también diría que se trata de una cultura algo “sosota”. Y a diferencia de países vecinos como Tailandia o Camboya por ejemplo, el laissez faire et laissez passer típico de Malasia hace que no haya una interacción tan divertida con los malasios.

Lo – de Malasia

1. No es un país “excesivamente alegre”

Lo he comentado justo en las últimas virtudes de mi enumeración. La tolerancia del pueblo malasio los ha convertido, quizá, en un pueblo tan despreocupado por sus vecinos y visitantes, que lo hace ligeramente aburridos.

2. Los horarios son limitados

Malasia no es un destino de fiesta. A las once de la noche, los locales bajan sus persianas y deja de haber un alma en la calle.

3. No encontrarás muchas cosas que comprar

Con la salvedad de Kuala Lumpur, una de las capitales de Asia ideales para ir de compras, y de los pequeños souvenirs que pueden adquirirse en Ipoh, Georgetown, Malaca y Kuching; no encontrarás muchos recuerdos que comprar en el resto de ciudades de Malasia más dedicadas a la venta y consumo de productos para locales que para turistas.

4. Deberás cuidar la vestimenta en las zonas más conservadoras del país

Malasia es un país musulmán y en las zonas más conservadoras y tradicionales del país, deberás abandonar los típicos pantalones cortos y las camisetas de tirantes. No es que esté prohibido y probablemente nadie te dirá nada por vestir así; pero al menos en nuestro caso, preferimos adaptarnos a los canones culturales de los lugares que visitamos.