Hikkaduwa es uno de los grandes destinos turísticos del país. Cuenta con una de las mejores playas de Sri Lanka y se encuentra ubicada a unos veinte kilómetros al noroeste de Galle.
![]() |
Playa de Hikkaduwa |
Se trata de una extensa playa en la que la arena de la orilla continúa unas cuantas millas mar adentro convertida en arrecife. Muy expuesta al océano, está a merced de fuertes y peligrosas corrientes, pero es ideal para la práctica del buceo y el surf. Y nadie debería tomarse a broma esta advertencia, pues nosotros presenciamos lo que de milagro no fue el ahogamiento de un turista imprudente.
![]() |
Hay una gran variedad de tiendas artesanales en Hikkaduwa |
Situada en plena carretera general entre Colombo y Matara, uno de sus inconvenientes es caminar por los arcenes atestados de pequeñas tiendecitas de textil, cuero, esculturas de madera, joyas, especias, té y pinturas, además de numerosos restaurantes, bares, pizzerías y hamburgueserías.
![]() |
Hikkaduwa es una playa expuesta a fuertes y peligrosas corrientes |
Hikkaduwa tiene, además una gran zona de playa llena de resorts, piscinas, salones con spa y turistas de todas las nacionalidades, pero la costa es tan extensa que hay sitio también para la tranquilidad de las playas vírgenes.
![]() |
Hotel Oasis Villa en Hikkaduwa |
Nosotros desembarcamos en el Hotel Oasis Villa, un pequeño establecimiento hotelero con piscina, pocas habitaciones y rodeado de un magnífico palmeral. Aunque quizá es el personal que lo regenta lo más reseñable de este hotel de menos de una docena de habitaciones.
![]() |
Macarena vuela la cometa de un ceilandés |
El tiempo seguía igual de revuelto, así que continuamos con el plan de piscina, paseos y relax, mucho relax, mientras caía algún que otro chaparrón.
![]() |
Relax, mucho relax |
La comida – al igual que en Mirissa– era mucho más adecuada al paladar occidental y pudimos encontrar todo tipo de manjares: desde toda clase de marisco fresco, a exquisitas pizzas.
Y hay una especialidad en estas costas del Sur a la que llaman Jumbo Prawn. Es algo así como un langostino gigante digno de observar, y para algunos también de degustar, aunque debo decir que a mí no me hace especial ilusión este tipo de ideas, ya que no me gustan ni los langostinos, ni las langostas y, las cigalas… sólo a veces. Yo soy más de la carne blandita de las gambas. Pero evidentemente Yayo no se podía marchar de allí sin probarla. El precio de este exótico manjar ronda las 2000-2500 (12€ – 17€) y, a pesar de ser anunciado en las cartas de todos los restaurantes de la zona, hay que asegurarse primero de que ese día tienen ejemplares frescos.
![]() |
Jumbo Prawn en el New Imperial Hotel de Hikkaduwa |
Aquella noche cenamos en el New Imperial Hotel, un restaurante típicamente asiático, que estaba justo enfrente de nuestro hotel; y no sabemos si fue por casualidad, o por el aguacero apocalíptico que empezó a caer, pero sólo nos cobraron por plato 1.200 LKR (7€). Así que apuntad el nombre porque, al parecer, es el lugar más barato donde probarlas y que, además de ser un sitio estupendo, tiene una extensa carta de magníficos platos.
![]() |
Jumbo Prawn a la parrilla en el New Imperial Hotel de Hikkaduwa |
Y así, entre playa, piscina, tiendecita y chiringuitos fue terminando nuestro periplo por tierras ceilandesas. Pronto abandonaríamos este maravilloso país que tanto nos ha mostrado y en el cual hemos disfrutado de tantas y tan variadas experiencias.
![]() |
Manto verde del Sur de Sri Lanka (Hikkaduwa) |
¡¡Qué bonito, Macarena!! Lo que más me ha gustado, la foto de tu hija, es la imagen de la felicidad y la despreocupación… ¡¡¡qué gozada!!!
Un beso a ti y a tu familia
Chari, como siempre, agradezco tus comentarios. Macarena es genial!!!! Como los camaleones, sabe adaptarse. Espero que siga así cuando crezca. Muchos besos.