El objetivo principal de nuestro viaje a Azerbaiyán fue visitar Bakú y sus alrededores, algo que conseguimos hacer en los tres días de estancia, sin prisas, con una buena organización y haciendo uso del transporte individual.
En esta entrada hablaremos de nuestro recorrido por la ciudad y dedicaremos algunas otras a hablar de lugares específicos de Bakú que por su interés, merecen un desarrollo más detenido.
Recorrido Día 1 en Bakú
Nuestro Hotel estaba ubicado en la ciudad vieja de la capital, lugar escogido premeditadamente para poder realizar la mayor parte de las visitas a pie.
Casco antiguo de Bakú (Icheri Sheher)
La ciudad vieja de Bakú es el corazón de la ciudad, una antigua fortaleza amurallada inscrita como Patrimonio de la Humanidad en 2000, después de haber permanecido en la lista de Patrimonio en Peligro durante los seis años anteriores.
Nuestro recorrido por la ciudad comenzó, como no podía haber sido de otra manera, por este bello enclave de calles empedradas y estrechas, rodeado de murallas y lleno de la misma vida que el ir y venir de turistas, locales y comerciantes debió proporcionarle en el pasado.
Los principales enclaves de Icheri Sheher, como se conoce al casco antiguo de Bakú, son la Torre de la Doncella (Maiden Tower) y el Palacio de los Shirvansháhs, que son los dos únicos lugares en los que hay que pagar entrada (12 AZN – 7€), pero toda la ciudad vieja es de una belleza exquisita y además se pueden visitar varias mezquitas, el museo de libros en miniatura, el teatro de marionetas, algunos baños y sus caravasares.
Dedicamos la mañana completa del primer día, después de sacar dinero y comprar una tarjeta SIM, a recorrer esta parte de la ciudad.
Posteriormente, nos acercamos al Restaurante Dolma, cerca de Fountain Square y frente al Parque Nizami y el Museo Nacional de Literatura, para comer.
Bajamos hacia el Paseo Marítimo por la calle Mammadamin Rasul-Zadeh, una animada calle peatonal llena de cafeterías que se llena de gente a media tarde.
Bulevar de Bakú
Para llegar al Paseo Marítimo, hay que atravesar un subterráneo, de los muchos que hay en Bakú, ya que en el centro es la única forma de cruzar de un lado a otro de la calle cuando se instala el circuito de Fórmula 1.
El Bulevar de Bakú se inauguró en 1909 cuando los magnates del petróleo construyeron sus mansiones a orillas del mar Caspio ganando tierras al mar, y se extiende unos 26 km.
Siguiendo la línea de costa en dirección Sur, donde se encuentra Deniz Mall –el edificio con forma de flor- se pueden ver Swans Fountain, una fuente con esculturas de cisne, y la Plaza de la Bandera.
Plaza de la Bandera de Azerbaiyán
Esta bandera de Azerbaiyán mide 35 por 70 metros y se encuentra izada en un mástil de 162 metros de altura que habría sido el más alto del mundo según el libro Guinness de los récords hasta ser superado por el mástil de Dusambé, de 165 metros, en Tayikistán, construido por el mismo diseñador estadounidense.
Little Venecia
Junto a la Plaza se encuentra Little Venecia, uno de esos lugares bizarros que hacen en estos sitios en los que parece que el dinero sobra.
La Pequeña Venecia de Bakú es una ciudad construida en 1960 por el alcalde de Bakú, Alish Lambaranski, quien se inspiró en su visita a Venecia y quedó maravillado por su belleza. Decidió recrear ese encanto en su propio país y se propuso crear un escenario igualmente encantador en su ciudad. Pronto, el parque costero de Bakú se convirtió en la única atracción de su tipo en la Unión Soviética.
En la Pequeña Venecia se pueden alquilar botes a motor, en la que un “atento gondolero” te lleva a dar una vueltecilla por lo que no deja de ser una gran piscina rodeada de edificios y puentes al más verdadero estilo de la ciudad italiana.
Museo de la Alfombra de Azerbaiyán
Junto a Little Venecia se encuentra el Museo de la Alfombra de Azerbaiyán, inaugurado en 2014. En el año 2010 las alfombras de Azerbaiyán fueron proclamadas » Obra Maestra del Patrimonio Inmaterial » por UNESCO, y cuando se creó el museo, ubicado anteriormente en otro lugar, fue el primero del mundo dedicado a las alfombras.
Si a alguien le interesa este tipo de exposiciones, puede visitar el museo, pero para nosotros el interés residía en la arquitectura peculiar del edificio, que simula una alfombra enrollada.
Baku Eye
Un poco más allá, se encuentran Baku Eye, la Noria de Bakú.
Esta Noria, a la que también se puede llegar en los autobuses 5, 6, 88 y 125, posee 30 cabinas con una capacidad para 8 personas cada una. Desde ella, se pueden divisar muchas de las atracciones de la ciudad y un paseo dura aproximadamente 30 minutos. Su precio es de 2,50€
Y la última de las atracciones de interés de este paseo marítimo es Baku Cristal Hall, el edificio en el que se celebró el Festival de Eurovisión en 2012.
Además, en el mismo paseo marítimo, aunque en el lado diametralmente opuesto a éste, se puede contratar un crucero por el mar Caspio por tan sólo 2,50€ el pasaje.
Tras visitar el Museo de la Alfombra y una curiosa escultura de una mano saliendo de la tierra que hay junto a él, nos dirigimos al funicular que se encuentra detrás (cruzando la calle) para subir hasta la zona de las Flame towers.
El funicular cuesta 1 AZN (0,50€) por trayecto y tarda unos 3 ó 4 minutos.
The Flame Towers
En el escudo de Bakú lucen sobre fondo azul, tres llamas –no en vano a Azerbaiyán se le ha llamado “tierra de fuego” por el fuego que sale del interior de la tierra y entra en combustión al contacto con el aire- y las Torres de llamas, vienen a escenificar arquitectónicamente lo que es Azerbaiyán.
Las Flame Towers son los tres rascacielos más altos de Bakú, lo que unido a que se ubican sobre una colina, hacen que desde su construcción, en 2012, sean visibles desde cualquier parte de Bakú y se convirtieran en símbolo de la ciudad.
Las torres miden 190, 160 y 140 metros de altura y en ellas se ubican apartamentos, oficinas y un hotel, el Fairmont, de cinco estrellas, en el que las habitaciones oscilan entre los 300 y los 3.000€ por noche.
Las fachadas de las tres torres experimentan una transformación impresionante cuando cae la noche al convertirse en enormes pantallas mediante el uso de más de 10 000 leds de alta potencia.
La iluminación de las Flame Towers ha sido aclamada como la mejor del mundo. Las torres se iluminan recreando el movimiento de una llama y generan un espectáculo visual visible desde todos los rincones de la ciudad. Esta iluminación crea el efecto de majestuosas antorchas, destacando así el concepto central de las Flame Towers, como su nombre indica.
En esta parte alta de la ciudad, además de las emblemáticas torres y de la inigualable vista de toda la ciudad de Bakú, se encuentra la Mezquita Azul o Mezquita de los Mártires, nada más salir del funicular, el Callejón de los Mártires y el Monumento a la Llama Eterna.
El Callejón de los Mártires es, en realidad, un cementerio dedicado a los caídos por el ejército soviético durante el Enero Negro y a los muertos en la guerra de Nagorno-Karabaj.
En 1998, por orden del presidente Heydar Aliyev, al final del Callejón de los Mártires fue instalado el Monumento a la Llama Eterna.
Un poco más arriba (bastante más arriba), se puede ver la Torre de Televisión de Bakú, así como algunos campos de extracción de petróleo.
Mezquita Taza Pir
Descendimos por las largas escaleras y pusimos rumbo a la mezquita Taza Pir, en el Distrito de Yasamal, cerca de la ciudad antigua.
Pese a que no se encuentra tan lejos del centro, el barrio muestra una cara distinta de Bakú, el de un vecindario donde el pulso de la vida es diferente: tiendas de barrio, ropa tendida, gente local que va y viene, niños que juegan en la puerta de sus casas…
La mezquita Taza Pir fue construida gracias a la dedicación de una mujer, Nabat Ashurbeyli, en 1905. No obstante, las obras de la misma fueron suspendidas a su muerte y su hijo finalizó la obra de su madre en 1914. Tras la integración de Azerbaiyán en el Imperio Ruso, en 1917, la mezquita estuvo funcionando como cine y granero hasta 1943, y desde entonces, no ha dejado de funcionar como mezquita.
El mihrab y la cúpula de la mezquita son de mármol, mientras que la parte alta de los mineretes y las inscripciones se hicieron de oro.
Palacio Ismailiyya
Después de ver la mezquita Taza Pir, nos dirigimos al centro haciendo antes dos visitas. La primera de ellas fue el Palacio Ismailiyya, una joya del estilo gótico veneciano, que destaca muy por encima del resto de las bellas edificaciones de Bakú.
El edificio alberga actualmente la Academia de Ciencias de Azerbaiyán. Fue construído a principios del siglo XX por el magnate Musa Naghiyev en honor a su hijo fallecido, Ismayil, por lo que recibió su nombre.
Happiness Palace
El auge de la industria petrolera en Bakú a finales del siglo XIX provocó la construcción de una impresionante colección de arquitectura, que combina estilos locales y europeos, y que cambió por completo la imagen del centro de Bakú.
El Palacio de la Felicidad (1910), también conocido como Palacio Mukhtarov, es una lujosa mansión de estilo gótico francés que perteneció a otro barón del petróleo muy influyente, Murtuza Mukhtarov, que la mandó construir para su amada esposa enamorado de la arquitectura europea durante sus múltiples viajes.
Finalizamos el día cerca de la Plaza de las Fuentes, donde cenamos, y antes de marchar a dormir, visitamos algo del interior de la ciudad antigua donde, al caer la noche, se iluminan muchos de sus monumentos.
Recorrido Día 2 Parque de Qobustan y Península de Absherón
El segundo día de nuestra estancia en Azerbaiyán lo dedicamos a recorrer los alrededores de Bakú visitando en concreto, el Parque de Gobustán y sus petroglifos milenarios; los volcanes de lodo, los pozos de petróleo, la Mezquita Bibi Heybat y la Montaña y el Templo de Fuego.
La excursión nos ocupó la mayor parte del día, no porque los sitios estén excesivamente alejados, que algo sí que lo están, sino por el estado de las carreteras y por el tráfico en el centro de la ciudad.
Recorrido Día 3 Bakú
El último día de nuestra estancia decidimos dedicarlo a los lugares más alejados del centro de la ciudad y, por tanto, menos concurridos.
Heydar Aliyev Centre
Lo primero que hicimos fue tomar un Bolt (2.40 AZN – 1.30€) hasta el Centro Heydar Aliyev.
El Centro Cultural Heydar Aliyev se considera uno de los símbolos de Bakú moderno. En 2014 fue reconocido como el mejor edificio en el mundo con el premio Design of the Year.
Realmente la hora que escogimos para visitarlo fue ideal porque evitamos el contraluz con el que nos hubiéramos encontrado de haberlo visitado pasado el medio día.
Yasil Bazar
A pocos metros del centro Heydar Alyev se encuentra el Bazar Yasil, un colorido mercado local en el que los viajeros encontramos especias, frutos secos, té y miel.
Pero el bazar Yasil cuenta además con una infinidad de productos frescos ofrecido con la mejor y más amable rostro de Azerbaiyán.
Mezquita Heydar
Otro Bolt (3.00 AZN – 1.60€) nos llevó a la Mezquita Heydar, construída en honor al presidente de Azerbaiyán Heydar Alyev.
La mezquita se inauguró en 2014 y es una edificación de extraordinaria belleza que merece la pena visitar. Posee cuatro minartes de 95 metros y es ejemplo de la escuela arquitectónica de Shirvan.
Y como ocurre en algunos otros lugares del Cáucaso, en este lugar comparten culto chiitas y sunitas.
Taza Bazar
De nuevo un Bolt (3.37 AZN – 1,84€) nos llevó a Taza Bazar, uno de los bazares más antiguos de Bakú, con 80 años de antigüedad.
El barrio en el que se ubica posee altos bloques de casas, muy al estilo soviético, mostrando un paisaje urbano muy distinto al que puede contemplarse en otras zonas de Bakú. Cerca del bazar se encuentra el edificio circular de Baku State Circus, de arquitectura soviética, en el que se ubicaba un circo permanente que hace años dejó de funcionar.
Taza Bazar es mucho más tradicional que el Bazar Yasil y por las miradas de los vendedores, pocos deben ser los extranjeros que lo visitan.
El mercado se estructura como las antiguas organizaciones gremiales: aquí la carne, allá la fruta, en el otro lado el pescado, las herramientas, los utensilios de fontanería…
Dicen que es el mejor lugar para comprar esturión y caviar negro.
De Taza Bazar volvimos de nuevo al centro en Bolt (2.00 AZN – 1€) donde comimos y pasamos la tarde comprando algunos recuerdos y volviendo a los lugares y rincones que más nos habían gustado en los días anteriores.
4 comentarios
Este país era un total desconocido para mi y gracias a tus entradas lo he llegado a conocer y disfrutar a través de vosotros, gracias!!!
Muchas gracias, Asun, a ti.
¡Qué bonito todo, Macarena!
Particularmente, por cuestión de gustos, me quedo con todo lo recorrido el primer día. Además, te diré que no esperaba encontrarme tantas cosas interesantes, en historia, en arquitectura, en datos del libro Guinness de los récords, etc.
Se nota que hay opulencia.
Luego, cerquita, tenemos la otra cara de la moneda, ¿verdad? con ese barrio de gente humilde, que ves su ropa tendida, y donde los niños juegan en las puertas de las casas.
Todo tiene su encanto……eso también es muy cierto.
Veo que fueron tres días muy bien aprovechados, y te agradezco el trabajo de compartirlo aquí. Eso nos ayuda mucho a hacernos una idea certera del lugar, y sobre todo tomar nota quienes pretendan viajar hasta allí.
Un abrazo inmenso.
Y un beso gigante, querida amiga.
El día de la excursión fue también muy chulo, ya lo verás. Cosas únicas. Pero es cierto que Bakú sorprende muy para bien, sobre todo porque, al ser tan desconocido, uno no va con expectativas.
Me alegra que te haya gustado. A nosotros nos encantó.
Muchas gracias a ti, Nélida.
Un beso enorme. Gracias por leernos.