El Monasterio de Bachkovo es el segundo monasterio más grande de Bulgaria y se encuentra a 30 km de Plovdiv, en el corazón de los Montes Ródope.
Además de ser el segundo Monasterio más grande de Bulgaria, se trata del segundo más visitado, siendo concurrido por visitantes y peregrinos los fines de semana y las vacaciones ortodoxas.
El Monasterio se extiende sobre casi 8.000 metros cuadrados e incluye dos patios y cuatro Iglesias.
Bachkovo fue fundado en 1083 y tenía una suerte de “status independiente” que logró mantenerse hasta el siglo XIV. Durante la dominación otomana del país, la vida se tornó difícil en Bachkovo por los robos y continuos saqueos, aunque en el siglo XVII el Monasterio fue completamente restaurado.
Icono milagroso de la Santísima Virgen
El centro de la vida espiritual del Monasterio y su razón de ser gira en torno al Icono del Milagro de la Santísima Virgen.
Durante la dominación otomana, el icono estaba oculto a dos kilómetros del Monasterio, en una zona rocosa de bosque llamada Kluviata, pero fue repuesto en el Monasterio en el siglo XVII. Posteriormente, y de forma misteriosa, el icono desapareció en dos ocasiones, pero parece ser que los monjes volvieron a encontrarlo en este mismo lugar.
La representación de la Virgen es una de ‘ternura’ (un término, usado cuando el bebé Cristo es presionado suavemente sobre el rostro de María). Tiene cubierta de plata y oro. Se cree que se trata de un icono del siglo XI. Del lado de Nuestra Señora, se puede ver una inscripción: ‘Vlaherniotisa‘. Lo más probable es que signifique que el icono podría ser una copia de la famosa Santísima Virgen Blachernae, patrona de Constantinopla y protectora de ataques militares inesperados.
En relación con el descubrimiento del icono y su regreso al monasterio, hay una procesión organizada en el segundo día de Pascua que comenzó a principios del siglo XVII. Aunque, independientemente de ella, son cientos los fieles que se acercan al monasterio a pedir sus favores.
El Monasterio de Bachkovo
Llegamos al Monasterio de Bachkovo después de visitar el de Rila. Atravesamos la autopista desde Sofía y luego nos desviamos hasta Plodvid, desde donde alcanzamos al Monasterio.
Se puede dejar el coche antes de la entrada para no pagar parking, o bien, aparcar en cualquiera de los tres aparcamientos que hay al subir una larga pero poco empinada cuesta. En cualquiera de ellos hay que pagar 2 leva (1€)
A lo largo de la cuesta se encuentran numerosos puestos de souvenirs religiosos y de productos típicos de la zona, como artesanías hechas en madera o conservas de la región (nueces, mermelada, miel, etc.)
Llegamos al monasterio alrededor de las 17:00 así que las tiendecitas estaban cerrando y en el monasterio no había casi nadie por lo que además, nos perdimos muchos de los mejores lugares que alberga en su interior. No obstante, si ya es una pasada visitar un monasterio ortodoxo en Bulgaria, hacerlo a última hora del día, en completo silencio y soledad, es una maravilla.
Se accede desde el exterior al patio principal en el que se encuentra la Iglesia de la “Asunción de la Virgen” con planta en forma de cruz griega y una característica cúpula. Lo curioso de esta Iglesia es que la comunidad obtuviera el permiso del gobierno otomano para construir un templo de estas dimensiones.
El iconostasio, con tallas de madera chapada en oro y cobre, es uno de los más antiguos de Bulgaria (siglo XVII).
Las paredes se hallan cubiertas de frescos que representan escenas de santos y a ambos lados de la puerta central, se encuentran las tumbas de dos altos jerarcas de la iglesia ortodoxa búlgara: Stefan y Kiril, que tuvieron un papel decisivo evitando la deportación de los judíos búlgaros a los campos de exterminio nazis en 1943.
Un segundo patio alberga la Iglesia de los Santos Arcángeles Miguel y Gabriel. Se trata de una Iglesia de dos pisos resultado de la conexión de dos edificios en el que el ábside de la iglesia más antigua se insertó en el nártex de la iglesia principal.
La tercera Iglesia del Monasterio es el Templo de San Nicolás y se usa para bautizos. Se encuentra decorada por frescos de Zahari Zograf y entre sus escenas se incluyen el juicio final, el cielo, el infierno y representaciones de santos.
La iglesia está en funcionamiento hoy y se usa para bautizar.
El osario está situado a 300 metros al este del monasterio y es el edificio conservado más antiguo de la zona y es único en el este ortodoxo. Tiene dos pisos. En la primera planta, hay 14 tumbas, que contienen los huesos de antiguos monjes. El segundo sirve como iglesia funeraria. Justo al lado del osario se encuentra el cementerio del monasterio.
El antiguo refectorio es uno de los lugares más interesantes del monasterio de Bachkovo e incluye el refectorio y la cocina conectados. Ambos fueron construidos o restaurados en 1623.
El refectorio se separa de la cocina por una pequeña estancia. La mesa del comedor está hecha de grandes placas de mármol y, en la parte superior, hay una inscripción que indica que fue construida en 1601 por el artesano Nikola durante el tiempo del abad Matei. La fecha de la mesa es diferente a la del edificio, lo que sugiere que podría haber habido una construcción anterior con el mismo propósito en este sitio.
Toda la sala ha sido decorada con frescos religiosos que combinan con escenas de escuelas de pensamiento antiguo.
En la pared exterior del Antiguo Refectorio, podemos encontrar el fresco más grande de Bulgaria del siglo XIX. Gracias a su ubicación bajo un techo prolongado, está perfectamente conservado. El autor es Aleksi Atanasov. Utilizó como guía una imagen más antigua de 1807, que retrataba el monasterio y sus alrededores, retratos de los fundadores, las celebraciones del segundo día de Pascua, el final de la ciudad (Asenovgrad) y muchas capillas en la zona. Posee el estilo del renacimiento nacional. El fresco proporciona información histórica sobre el estado del monasterio después de su fundación. Por lo que se puede ver que, a pesar de tener que ser reconstruido varias veces, el monasterio había logrado mantener una apariencia constante a lo largo de los años.
Información Útil
Horario de apertura
9:00h – 19:00h en invierno
7:00- 20:00 en verano
Entrada
Monasterio y la iglesia. Gratis
El refectorio – 6 BGN
El museo – 2 BGN
El Osario – 6 BGN
Visitas guiadas en búlgaro, Inglés, Francés y Ruso – BGN 10
Alojamiento en el monasterio
El Monasterio Bachkovo tiene una capacidad de 200 camas.
Hay habitaciones varias camas y un baño inodoro compartido en el mismo piso por el precio de 10 leva por cama.
Las habitaciones con baño son de dos, tres o cuatro camas. El precio es de 20 leva por cama.
El alojamiento en el monasterio debe hacerse antes de las 17:30.
Para reservas: teléfono +359877 838 068; correo electrónico : marina6006@abv.bg
Solo las parejas casadas pueden alojarse en una habitación.
10 comentarios
Hola Macarena! Por fin puedo visitarte! jaja Me encanta el sitio que enseñas hoy. Me resulta precioso y es que tengo cierta fascinación por los lugares de culto ortodoxos. Sus pinturas, su arquitectura.. tiene algo que me resulta increíble. Espero que pronto podamos visitar Bulgaria, porque se que me va a gustar mucho. De momento, creo que este año no va a tocar, pero bueno, igual el que viene. Besos.
Os encantará este país, Verónica. Es accesible, barato, con gente encantadora, buena gastronomía y muchas muchas cosas que ver, sobre todo, Monasterios e Iglesias.
Un besito
Me ha encantado, el fresco del Juicio Final una maravilla y me asombra que se pueda conservar tan bien el fresco que hay en el exterior del Antiguo Refectorio, que ya sabemos el tiempo que hace en Bulgaria…..bendito techo sotechado!!! Aunque he de reconocer que este tipo de monasterios llenos de frescos son mi perdición. No sabía que se podía dormir allí, será una experiencia religiosa (como decía la canción) jajaja.
Un abrazote
Alicia
Los Monasterios de Bulgaria son una maravilla, sobre todo si los encuentras casi vacíos, como nos ocurrió en casi todos cuando fuimos. Lo mejor, es verdad, son sus frescos y hay tantos que creo que llevaría toda una vida observar sus detalles.
Lo de dormir… yo la verdad es que no lo tenía claro, sobre todo por el frío. Pero sí, puede ser una experiencia increíble.
Un fuerte abrazo
Un monasterio espectacular debido a la magnitud de su extensión, ni más ni menos que 8.000 metros cuadrados = 8 kilómetros…
Me han gustado mucho las galerías que pueden apreciarse de estilo bizantino en algunos patios, así como la calidad artística de los iconos religiosos que abundan en su interior.
Considero que tuvísteis una gran suerte al poder visitarlo tranquilamente, en silencio y solos ¡qué gustazo!
El interior de la iglesia de la «Asunción de la Virgen» lo encuentro muy artístico, lo mismo que el del Templo de San Nicolás.
Un placer seguir descubriendo estos lugares tan curiosos de Bulgaria, desde casa y de la mano de mis amigos de «El mundo con ella».
Un besazo y feliz semana!!!
Gracias Estrella,
Los Monasterios de Bulgaria son, en general, espectaculares por su ubicación, su arquitectura, su ornamentación y sus tradiciones. Son de una riqueza inigualable, aunque a mí lo que más me llamó la atención fue el fervor religioso que en ellos se respira en torno a sus iconos milagrosos y sus reliquias.
Dicen que siempre están llenos, que las peregrinaciones son constantes; sin embargo, en nuestro viaje no encontramos a viajeros en ningún sitio ¡Todo un privilegio!
Me alegro que vengas siempre con nosotros.
Un beso
Hola Macarena, fantástico Monasterio,… a mi me recuerda mucho al Monasterio de Sinaia en Rumanía, imagino que todos los monasterios ortodoxos (como los católicos) guardan una tipología semejante. Y el lujo de visitarlo al atardecer y con pocos turistas/fieles creo que todavía le da más valor a vuestra visita. Me ha encantado!
Tuvimos mucha suerte, Norte, de no encontrar casi turismo en nuestro viaje. Fue la tónica ¿Sabes lo que es visitar una tumba tracia original nosotros tres sólo con la guía? La verdad que, en este viaje, nos sentimos unos privilegiados.
Un fuerte abrazo
Jo, menudo remanso de paz. Si ya el lugar inspira paz y recogimiento, visitarlo a esas horas y casi en solitario desde luego que imagino que sería una experiencia casi espiritual. Me encantó la historia de ese icono, y es que hay objetos que parecen tener vida propia. Al menos en mi caso, me estás descubriendo un país totalmente desconocido. Un abrazo, Macarena!!
Eso mismo nos pasó a nosotros, David. Bulgaria era un país desconocido que nos encantó descubrir.
¡Un fuerte abrazo!