¿Monos? ¿Saltos de agua? ¿Grutas de Ogros? Consensuamos que una buena excursión para distraer a Macarena sería recorrer los aproximadamente 150 kilómetros que separan Marrakech de las Cascadas de Ouzoud y hacer una parada en el Puente de Imi-n-ifri.
Cascadas de Ouzoud (Marruecos) |
Puente de Imi-N-Ifri
Demnate es una población a 92 kilómetros de Marrakech rodeada de olivares que se encuentra a los pies del Atlas. Esta pequeña población, de unos 40.000 habitantes, es mundialmente famosa por su “verde demnati”, tan conocido entre pintores y artistas, como el “azul voronet” de Rumanía.
Demnate |
Era domingo, y la ciudad estaba atestada de visitantes de los alrededores que acuden semanalmente a su mercado; aunque lo que más nos llamó la atención fue que “por San Blas las cigüeñas verás” ¡justo! En cada minarete había un nido ocupado por una cigüeña ¡Qué ilusión nos hizo!
Zigüeñas en un minarete de Demnate |
Pero Demnate era tan sólo un lugar de paso para nosotros: a tan sólo 6 km. al sureste de esta población, existe una maravilla natural que impone por la magnitud de su envergadura. Se trata del Puente de Imi-n-ifri.
Puente de Imi-n-ifri |
El Puente de Imi-n-ifri es un puente natural formado por la erosión de miles y miles de años en la unión de dos montañas separadas por el río Mehasseur. Sobre el puente, además transita la carretera. Y, junto a él, existe un parking y un par de hoteles-restaurantes con grandes terrazas elevadas para contemplar la zona.
Furgoneta de pasajeros en el Puente de Imi-n-ifri |
Puente de Imi-n-ifri |
Puente de Imi-n-ifri |
Llamado “Puerta del Abismo”, también se le conoce como “Gruta del Ogro” ya que los ancianos del lugar cuentan la leyenda, que oyeron de sus madres, y éstas a su vez de las suyas, acerca de que el Puente era el refugio de un malvado Ogro que atemorizaba a los habitantes de la zona.
Escalera lateral de acceso al Puente de Imi-n-ifri |
Para poder observarlo mejor, se puede descender por uno de los lados y subir por el otro. Y, pese que no hay problemas para hacerlo solos, hay niños y jóvenes guías que se ofrecen a acompañarte por unos cuantos dirhams. La diferencia está en que ellos, que conocen el sitio, te señalan las rocas menos resbaladizas y los mejores lugares de paso para no mojarte con el agua que se filtra desde lo alto de las roca. La cúpula del puente, a 30 metros, se encuentra llena de estalactitas y entre ellas habitan cientos de palomas silvestres. Además, bajo el puente pueden observarse cuevas naturales creadas por la erosión del río, aunque dicen, que también sirvieron como refugio de ancestrales habitantes… los ogros ¿Quién sabe?
Cascadas de Ouzoud (I)
Cascadas de Ouzoud |
Las cascadas de Ouzoud, a 150 km. De Marrakech, son las más grandes del Norte de África. Con una altura de 110 metros, el río Ouzoud, afluente del Oued el Abid, al que se une más adelante, cae en en tres tramos en este salto de la Cordillera del Atlas.
Plaza que da acceso -a derecha e izquierda- a las Cascadas de Ouzoud |
Desde la última vez que estuvimos allí ¡Años ha! Ha cambiado todo. Se ha construido una gran plaza y la zona se encuentra llena de alojamientos -tipo casas rurales- sencillos, pero limpios, acogedores, baratos y bonitos.
Nosotros elegimos Riad Dar Ouzoud ¡Encantador! Cuando llegamos, había un chaval esperando en la entrada del pueblo para indicarnos el camino exacto al lugar. No es que estuviera lejos, ni escondido, pero… por si acaso. Aunque el lugar era encantador y no dudamos en quedarnos, pese a haber realizado la reserva con booking -que podría penalizar en caso de desistir de la misma-, nos ofrecieron la posibilidad de decidir si nos quedábamos tras ver el hotel. La habitación triple con desayuno, nos costó unos 28€. Y la única pega que puedo ponerle es que, pese a que el baño era individual -sólo para nosotros- se encontraba fuera de la habitación.
Superdesayuno en Riad Dar Ouzoud |
Yayo estaba encantado con poder dejar el coche en el patio del hotel, en el que coincidimos con una pareja de españoles y con un matrimonio extranjero con dos niños pequeños. Lo cierto es que en la habitación hacía un poco de frío -aquella noche refrescó más de lo que estaba siendo habitual en este viaje, cosa extraña para un viaje en pleno invierno-, lo que paliamos con un par de radiadores.
Macarena en las Cascadas de Ouzoud |
Mis padres se quedaron al principio de la plaza. En la entrada del pueblo, hay numerosos lugares vigilados para aparcar en el que te proporcionan luz y agua. Aquel día no habría más de dos autocaravanas -puede que a los viajeros se les estuvieran acabando sus vacaciones navideñas- pero en muchas otras ocasiones, lo cierto es que el lugar se ambienta.
Habíamos llegado a media tarde y fuimos a dar una vuelta entre puestecillos de souvenirs y restaurantes para ver las cascadas. Pero estaba refrescando demasiado y decidimos refugiarnos en la autocaravana de mis padres a ver las noticias y picar algo. Dejaríamos los monos y los saltos de agua para el día siguiente.
12 comentarios
Huy, qué recuerdos me trae esta entrada tuya, querida Macarena, porque estuve allí durante mi segundo viaje a Marruecos, que fue en verano del 2009. Me encantaron las cascadas, nos guió un vecino del pueblo y nos llevó a los puntos más pintorescos y a la zona de las caídas de las cascadas, donde nos dimos un buen "remojón". No hicimos noche allí, y bien que siento haberme perdido un riad tan bonito y a buen precio como el que vosotros disfrutasteis, pero sí pasamos en la zona unas cuantas horas que se hicieron deliciosas.
¡Qué guapa sale tu pequeñina en la foto!
Besos y muchas gracias por compartir tan bellas experiencias. ¡¡¡Feliz semana,familia!!!
Me encanta la cascada, qué maravilla. Y me ha gustado el sitio donde os alojasteis, realmente se ve encantador. Me parece un precio estupendo el de la habitación triple y, si además contaba con ese súper desayuno… una ganga.
Un beso enorme, Macarena.
Argonauta, el sitio es espectacular y bien merece una visita. En la siguiente entrada, cuanto más cosas y he colgado más fotos. Seguro que vuelves allí algún día.
Muchos besos.
Hola Chari. En la siguiente entrada muestro el sitio con mayor exactitud y detalle. Espero que visites la entrada.
El Riad era precioso y el personal encantador y sí que estaba bien de precio!!!
Muchos besos Chari. Disfruta lo que queda de día.
Impresionante tiene que ser ver de cerca estas Cascadas de Ouzoud con ese entorno natural tan bello. Y también me ha fascinado conocer este puente natural de Imi-n-ifri que se ha originado gracias a las erosiones tan antiguas de esas montañas separadas por el río Mehasseur.
La habitación del, que nos muestras en las fotografías, me resulta acogedora y bonita con sus muebles tan típicos marroquíes, pero lo malo es que solo hubiera un solo baño para los tres y fuera de la habitación.
Muchos besos, Macarena y que pases una tarde y noche de martes agradable.
Hola Estrella, ya verás en la siguiente entrada las cascadas en todo su esplendor y con muchas fotografías, como sé que te gusta.
La habitación era muy chula. No creas que había cosas muchos mejores cerca. Así que lo del baño, no fue un impedimento.
Muchos besos y gracias por pasarte por aquí.
Preciosas todas las cosas que nos muestras hoy, Macarena, ¡¡con historia de ogros incluída!! La cascada es una auténtica maravilla en foto, así que me imagino que en vivo y en directo mucho más. Y el puente impresiona (no solo por los ogros, ji, ji). Me ha parecido baratísimo el alojamiento que nos muestras, realmente merece la pena.
Una entrada estupenda, como siempre. ¡¡Gracias!!
Un beso y feliz miércoles.
Hola Macarena amiga viajera, genial estas cascadas y este relato viajero. Porque todo lo bonito cuesta tanto, tanto esfuerzo, nada ver esas escaleras ya me canso, jja, las cascadas, ya sabes que tengo delirio por ellas por cierto a tu hija le encantaría el Monasterio de Piedra, gnomos, ninfas, ;))
Muchas gracias a ti Julia que siempre eres un encanto.
Tienes que visitar Marruecos. Sé que te está gustando más de lo que esperabas y es que Marruecos puede ofrecer al visitante mucho más que un simple viaje.
Un beso grande, aquí eres siempre bienvenida.
Hola Emerencia,
¿Gnomos, ninfas? Se volvería loca. A Macarena se le vuelven los ojos escuchando historias mitológicas, fantásticas, históricas,… ¡Madre mía! ¿En qué mundo vive esta hija mía?
Si visitas la siguiente entrada verás las cascadas en todo su esplendor. Son una verdadera pasada.
Muchas gracias por pasarte por aquí y mil besos.
que maravilla de lugar, yo quiero ir , y mi marido no quiere , Ya veremos como lo hacemos. Un abrazo
Jajajajjajaja Maria del Carmen, eres única. Sólo tienes que pillarlo en buen momento y seguro que accede. Una vez allí, ya verás cómo le encanta también a él.
Un beso muy fuerte.