Me ha resultado muy difícil emprender la tarea de escribir esta entrada, exactamente igual a lo que me ocurrió cuando tuve que escribir sobre los Templos de Angkor. ¡Los Templos de Bagan son palabras mayores! Como las Pirámides de Giza, el Taj Mahal, las Doncellas de Sigiriya, o los Moais de la Isla de Pascua; los Templos de Bagan son de esos lugares del mundo en los que la obra de la mano del hombre te deja sin palabras y la única manera de describirlos es haber estado allí y contemplarlos.
Templos de Bagán – Myanmar |
Como en la entrada anterior ya he facilitado los datos prácticos acerca de los Templos de Bagan, comenzaré como comencé cuando llegamos allí; contando a Macarena la Leyenda de Bagan
Templos de Bagán – Myanmar |
Dicen que cuando el rey bamar Anawrahta subió al trono, en Myanmar se profesaba el hinduismo como religión mayoritaria. Manuha, el rey mon de lo que ahora es el Norte de Tailandia, envió a un monje para intentar convertir al rey Anawrahta al budismo. El monje cumplió exitosamente todas las expectativas de su soberano y consiguió convertir al budismo al rey birmano. El Rey bamar, entusiasmado, envió a sus emisarios a solicitar textos sagrados de la nueva religión al rey “tailandés” Manuha que, sin embargo, receloso de la petición, se negó a avenirse a los ruegos del bamar. Así que Anawrahta montó en cólera –actitud muy típica de una religión de paz- y envió su ejército al Norte de Tailandia para conquistar el reino de Manuha con el objetivo de llevarse todo lo que encontró a su paso a su reino de Bagn. Se llevó los textos clásicos budistas, se llevó a los monjes y los eruditos y se llevó ¡hasta al propio rey Manuha!
Templos de Bagán – Myanmar |
Después de este episodio, Anawrahta se dedicó a erigir en su reino monumentos religiosos megalomaníacos que, curiosamente, son contemporáneos de algunos de los construidos en Angkor. Y de esta manera, comenzó el Primer Imperio Birmano, convirtiendo a Bagan en referente budista de Asia y lugar imprescindible de peregrinación en el Sudeste Asiático. Sorprendentemente, los escritos de la época denominaban a Bagán como “ciudad del aplastador de enemigos”.
Templos de Bagán – Myanmar |
Posteriormente, sus sucesores continuaron con esta fiebre constructora, dando lugar a lo que un día fueron los 4.400 Templos de Bagan.
Templos de Bagán – Myanmar |
Por desgracia, en el siglo XII, Bagan cayó en desgracia y sus tierras fueron invadidas, considerándose una región maldita poblada de espíritus y asaltantes hasta el siglo XVIII, cuando los bamares comenzaron a regresar a la zona.
Templos de Bagán – Myanmar |
Después de una buena ducha y el desayuno, cogimos nuestras bicis eléctricas y nos lanzamos a la aventura de descubrir los Templos de Bagaan. Llevábamos el mapa elaborado por Legatraveler que, de todos los que habíamos consultado, era el que más gráfica y claramente ofrecía información sobre la ubicación de los Templos de Bagan y cuáles de ellos son los más espectaculares para ver salir y ponerse el sol. El mapa, posteriormente, pasó a manos de una familia española en el ferry de Mingun. He de alabar el trabajo que han realizado los viajeros de Lega Traveler en la elaboración de este mapa que, sin duda alguna, recomiendo a todo aquel que vaya a visitar los Templos de Bagan.
Señalización en Bagán |
No es difícil recorrer los Templos de Bagan sin guía. Se trata de seguir la ruta de una carretera principal e ir cogiendo las bifurcaciones que llevan hasta los templos. A ello ayudan los mapas de ubicación y las señales en la carretera con el nombre de los templos.
Señalización en Bagán |
Se puede realizar todo el recorrido principal en un solo día, pero aseguro que un solo día en Bagán sabe a muy poco. Lo ideal es pasar en la zona dos o tres días: el primero para ver amanecer y visitar los templos principales, el segundo para visitar templos más lejanos y los menos conocidos y, el tercero, para hacer una excursión al Monte Popa y ver la Shwezigon Paya y el Mani Sithu Market. Pero cualquiera que sea el tiempo pasado en Bagan, es tiempo de disfrute para los ojos y el espíritu. En Bagan, todo lo que se ve es bello y todo lo que se hace es entretenido.
Htilominlo Paya |
Comenzamos nuestra visita de Norte a Sur, y lo primero que visitamos fue el Templo Htilominlo, que se convirtió en mi favorito. Este templo fue construido por el Rey del mismo nombre para honrar a la Diosa Fortuna. Cuenta la Leyenda que Htilominlo fue el elegido de sus cinco hermanos para reinar en el Reino de Pagán de una forma “poco ortodoxa”. Su padre, hizo sentar a sus cinco herederos en círculo e hizo girar una sombrilla cerrada. Donde apuntara la sombrilla al dejar de dar vueltas, señalaría al futuro rey.
Ananda Pahto |
Seguimos hasta el Templo Ananda. Ananda significa “bello” y es de los templos más grandes y sagrados de todos los Templos de Bagan. En su interior, además de cuatro budas gigantes, se encuentran esculturas, trabajos en madera y estuco e incluso vidrieras. Durante la luna llena de diciembre/enero, llamada Pyatho, se celebra una enorme fiesta que atrae a miles de fieles y peregrinos. En ella, más de un millar de monjes cantan día y noche sus plegarias durante los tres días que dura la fiesta.
Puerta de Tharaba |
Nos adentramos en Old Bagán a través de la Puerta de Tharaba, custodiada por los espíritus de dos hermanos, un hombre y una mujer que, cuando eran humanos, murieron en un incendio y hoy son venerados con ofrendas por la gente del lugar.
Templo Shwegugyi |
Intramuros, el Templo Shwegugyi posee en la entrada principal detalles de su construcción, trabajos que finalizaron en 7 meses y 7 días ¡Parece increíble!
Templo Thatbyinnyu |
No muy lejos se encuentra el Templo Thatbyinnyu que es el más grande de todos los Templos de Bagan. Dicen que su majestuosidad se debe a que fue construido para albergar las 539 tablas del Jataka. Los Jatakas son cuentos que narran las historias anteriores de las vidas previas al nacimiento de Buda. En ellos Buda aparece como un rey, un marginado, un dios, un elefante,… pero en cualquiera de las formas de sus reencarnaciones precedentes, el cuento expone alguna virtud a modo de moraleja. Sin embargo, las tablas nunca llegaron al templo y por esta razón, el templo nunca llegó a consagrarse.
Templo Thatbyinnyu |
A su lado, una pequeña estupa se construyó empleando un ladrillo por cada 10.000 colocados en el Templo Thatbyinnyu.
Pagoda Bupaya |
Me empezaba a doler el ir tanto rato montada en la bici, pues cuando vas por la carretera, está bien; pero cuando te adentras con ella por los caminos de tierra, te vas clavando la bici hasta en el alma. Así que decidimos hacer un descansito en la Pagoda Bupaya y en los chiriguitos de su alrededor.
Embarcadero en el río Ayeyarwady |
La Pagoda Bupaya está situada en la orilla del río Ayeyarwady, de hecho, a su izquierda hay una escalera que lleva a un embarcadero donde alquilar un barco para dar una vuelta por el río. Lo cierto es que no se trata de una pagoda bonita y tampoco es original. La de verdad cayó destruida al río con el terremoto de 1975, y fue entonces cuando, en lugar de reconstruirla en ladrillo, como la original, hicieron un pegote de hormigón y la pintaron de dorado. Sin embargo, es un lugar agradable al que acuden los locales que, entre sonrisas, te piden hacerse fotos.
Vendedoras de tortitas en la Pagoda Bupaya |
Nos compramos unas bebidas frías, un coco y unas tortitas de gambas y nos sentamos a descansar en un banco de madera, mientras observábamos el frenético ir y venir de turistas, fieles y vendedores. Y aquel frenesí, también era bello.
Mya Zedi |
Continuamos hacia el sur, hacia New Bagan, e hicimos una primera parada en Mya Zedi, en la zona llamada de Myinkaba. Las principales construcciones se encuentran bordeando la carretera principal pero, por increíble que parezca, apenas había trasiego de visitantes, peregrinos y vendedores. Es un lugar de paz. Allí es donde hay que ir.
Mya Zedi |
La pagoda Mya Zedi, que significa “estupa de jade”, fue construida por el pírincipe Raja Kumar para honrar la memoria de su madre. Es la única dorada de la zona.
Junto a ella, un poco más al sur se encuentra Mingala Zedi Paya que representa el punto culminante de la fiebre constructora de Bagan. Se trata de una copia de la Shwezigon Paya de Nyang U pero sin el recubrimiento dorado. Y su interés reside en que aún conserva 561 representaciones del Jataka. Se trata de uno de los últimos grandes monumentos de Bagan. El rey Narathihapati la construyó en la segunda mitad del siglo XIII, dicen, tentando al destino, pues había una profecía que decía que el reino de Bagán se acabaría al terminarse la construcción de la Pagoda. Diez años más tarde del final de la construcción, los mongoles invadieron Bagan.
Manuha Paya |
Siguiendo la carretera, encontramos el Manuha Paya, Templo que lleva el nombre del rey mon de Thaton que fue capturado por el rey Anawrahta porque permaneció cautivo en este lugar. Este templo alberga estatuas colosales de Buda embutidas en las estructuras. Dicen que, para significar el estado del rey Manuha durante su cautiverio. A su vez, el buda yacente de la parte trasera es el único que parece esbozar una sonrisa, dicen, que en su tránsito a la muerte; hecho éste que sería el único que podría esbozar la sonrisa de Manuha y el único que permitiría su liberación.
Buda en el interior de Manuha Paya |
Seguimos conduciendo hacia el sur pero, de pronto, algo llamó nuestra atención y bajamos por un camino de tierra hasta un santuario. Los rezos de monjes y niños alcanzaba la carretera y nos acercamos a mirar. Se trataba de un pequeño poblado de mujeres y niños junto a una estupa de la que brotaban oraciones ¡Dios, qué paz! Descansamos a la sombra bajo la atenta mirada de las sonrisas de los niños y, cuando nuestra alma se llenó, volvimos al camino.
Ciudad Monasterio en Bagán |
Estupas de Bagán |
Ya casi en New Bagán, la ausencia de visitantes nos hizo disfrutar de las estupas en silencio. Aquí sí que gozamos de Bagan. De sus templos, sus estupas, sus ladrillos y el polvo rojizo de su tierra. La brisa y el sudor. El sol, el silencio, sobre todo el silencio…
Seinnyet Nyima y Seinnyet Ama Patho |
Visitamos la Seinnyet Nyima Paya y Seinnyet Ama Patho, la Sittana Paya, Dhammayazika Paya, y toda la serie de pagodas, estupas y templos que se alzan hasta Nuevo Bagan. El Bagán de la soledad y el silencio, el Bagan del azul del cielo y el rojo de la tierra. Para nosotros, el auténtico Bagan, el que más disfrutamos.
Dhammayazika Paya |
Era bastante tarde ya y no habíamos comido, así que decidimos volver a Nyang U haciendo antes una parada en Shwsandaw Paya, “la pagoda de las puestas de sol” que es el punto más elevado de la llanura central.
Shwsandaw Paya |
A estas horas del día, yo estaba ya muerta, sedienta y hambrienta y… no subí las empinadas escaleras para contemplar la belleza de los templos en la llanura central de Bagan. Pero Bagan me tenía preparado el mejor recuerdo que me llevo de sus gentes.
Me senté a la sombra de un árbol, mientras subían Yayo y Macarena, y se me acercó una niña para venderme no recuerdo bien qué. Yo no quería comprar nada, no me apetecía decir de dónde soy, cuál es mi nombre, y… que no quería comprar nada; así que eché mano a mi mochila y saqué un muñequito, de los muchos que había echado en el equipaje para regalar a los niños cuando me regalan una sonrisa. Myint Aung –sí sí como el director de cine- salió corriendo y, al rato, volvió de nuevo sacando de un pequeño bolsito un dibujo que había hecho y, entonces, me lo regaló.
Si te ha gustado la entrada, puedes ver también nuestro vídeo sobre LOS TEMPLOS DE BAGAN
12 comentarios
Hola Macarena.
Transmites una pasión increíble en la redacción de este texto y cuando algo se hace con amor y dedicación se percibe con una facilidad fascinante.
La leyenda de Bagan es una rica aportación, las fotografías son bellísimas, si tuviera que elegir una me quedaría con la última por la humanidad que transmite esa mirada y además con referencia cinéfila incluida.
En fin, es tan completa la entrada que podría seguir y seguír….
Pero solo quiero añadir mi más sincera felicitación por la transmision de un sentimiento en forma de viaje.
¡Un beso familia!
Macarena cuentas como nadie esos viajes que hacéis maravillosos. Un abrazo
¡Oh Gracias, Miguel!
Te aseguro que me ha resultado muy muy difícil elaborar la entrada ¿qué hubiera debido hacer? ¿Hablar de la arquitectura? ¿De la Historia? Seguro que hay voces mucho más documentadas que yo a las que puede acudirse en caso de estar interesado en el tema; así que, lo único que podía hacer es contar cómo vivimos nosotros Bagán.
Me alegro que tú también hayas podido disfrutarlo.
Un gran beso
¡Hola Maria del Carmen!
Me llegan a lo más profundo tus palabras de ánimo. Esta vez, me ha resultado difícil escribir.
Muchas gracias. Besitos.
Sin palabras me has dejado, impresionante e impresionantes las fotos!! Un lugar increíble que no sabia que existía. Un besazo
el blog de sunika
Me alegro haber podido abrirte una ventana a esta parte del mundo. Besos.
Querida amiga Macarena y familia:
¡Qué desgraciada y terrible leyenda de Bagán, con todo esa conquista tan feroz y el llevarse hasta el rey Mahua, pobrecillo la que lió con no querer entregar aquellos textos sagrados!
Pues si que se entusiasmó el rey Anawrahta en construir templos grandiosos, porque desde luego Bagán está plagado de estos monumentos, que luego continuaron ampliando sus sucesores.
La foto de Macarena hija y Yayo también me ha gustado mucho, con todos los monumentos al fondo.
La ruta y los mapas los encuentro muy claros y útiles para desplazarse sin guía.
¡Qué maravilla el Templo Htilominlo!
Lo que he observado es que los otros templos están bastante descuidados y muy sucias las fachadas y muros.
Las estupas también me han resultado muy curiosas y llamativas, no había reparado en esas antiguas construcciones asiáticas, lo cierto es que la arquitectura y el arte en esta zona del mundo es una maravilla y ¡qué suerte verlo allí en directo!
La anécdota final de esa niña es encantadora y lo de llevar muñequitos en la mochila, para regalarlos a estos niños con esa sonrisa tan espontánea y bella, me ha dejado sin palabras.
Un besazo.
Hola Estrella!
Sé que a un escritora y lectora empedernida, le gustarían las Leyendas de Bagán ¡Y menuda Historia! de idas y venidas, conquistas y construcciones. Lo cierto es que parece un gran sinsentido al que, a Dios gracias, se debe tanta riqueza arquitectónica.
Lo cierto es que, pese al descuido en las restauraciones y la conservación de Bagán, es un lugar impresionante que merece la pena ver al menos una vez en la vida. Es un conjunto fascinante en que además puedes perderte con total tranquilidad.
Y los niños… los niños… las historias con niños siempre dejan sin palabras.
Muchos besos Estrella.
Qué difícil es trasmitir sentimientos ¿verdad?,… y si se trata de emociones en un viaje, a mi se me hace todavía más. Qué lugar tan hermoso, … me costaría decidirme por uno solo de los templos,… todos son bellísimos, pero, como dice +Miguel Pina, lo más hermoso es la serenidad y la paz que transmiten sus habitantes. Feliz fin de semana!
Pues Norte, precisamente, transmitir los sentimientos que te provocan lugares es una cosa que haces a la perfección en tu blog. Pero es indudable que es mucho más difícil que realizar sólo una descripción.
Me gusta que te haya interesado.
Un abrazo
Qué maravilla de viaje, Macarena. Puede que te costara sentarte y comenzar la entrada, pero te aseguro que el resultado ha sido mágico (por no mencionar el final, que es pura ternura). Las fotos, como siempre, espectaculares, y los detalles del recorrido y las leyendas, un lujo.
Como te dije ya tenía ganas de viajar con vosotros y hoy ha sido el día, ¡gracias! No sé si algún día llegaré a visitar Bagán y sus preciosos templos, pero al menos he podido conocer de su existencia a través de tu blog, de lo cual me alegro mucho :))
Un beso y feliz martes.
¡Hola Julia!
Gracias a ti por acompañarnos.
Me alegro que te haya gustado la entrada.
Y… quizás, si te lo propones, visitarás Bagán y volverás a leer esta entrada.
Un besazo