La Iglesia Fortificada de Valea Viilor es una de las siete iglesias fortificadas de Transilvania inscritas como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Y aunque es menos visitada que las de Viscri, Biertan o Prejmer, no por ello es menos espectacular que las anteriores. De hecho, destaca por ser una de las fortificaciones más robusta de las construídas por los sajones.


La aldea de Valea Viilor se encuentra a 37 km de Sibiu y 14 km de Medias, en una conocida área vitivinícola de Rumanía. El pueblo, es el típico sajón en el que las fachadas uniformes de las sólidas construcciones se encadenan unas a otras creando la impresión de largas murallas.
Iglesia Fortificada de Valea Viilor
La iglesia fortificada de Valea Viilor se encuentra en el centro del pueblo y sobresale por encima del resto de tejados. La fortificación destaca por sus dos grandes torres: el campanario y el coro de la iglesia, ambas fortificadas y aún hoy intactas.


Como en el resto de iglesias fortificadas de Rumanía, en el sitio de la iglesia actual se ubicó primero una basílica construida en el siglo XII con la fundación de la ciudad. La nueva iglesia se consagró a San Pedro, aunque no se conoce con esa denominación.


El edificio de la iglesia, de estilo gótico, fue levantado a principios del siglo XVI y el último nivel se dispuso como refugio de defensa en caso de asedio. Aquí se construyeron murallas, agujeros de tiro y espacios para lanzar proyectiles a los atacantes. El campanario, la nave de la iglesia y el coro se comunican entre sí como una verdadera fortaleza ubicada sobre la propia iglesia.


La nave central y el coro poseen un techo abovedado con un entramado de nervaduras que descansan sobre siete pares de ménsulas sobre columnas. El púlpito, de 1528, se confeccionó en un período de transición del gótico al renacimiento.


Además, se reforzaron los accesos a la iglesia con sólidos pórticos y rejas, una de las cuales, de 1525, se conserva intacta.


Un muro ovalado de 7 metros rodea la iglesia perimetralmente y, apoyado en los arcos, se encuentra un camino de vigilancia reforzado por cuatro torres más pequeñas.


Patrimonio artístico de Valea Viilor
La iglesia de Valea Viilor también tiene un valioso patrimonio artístico. Así, los bancos de madera datan de 1528, de carácter gótico y renacentista. El altar está fechado en 1779 y es obra del escultor Stephan Folberth de Sighişioara. El dosel sobre el púlpito (1746) y el órgano (1708) son de diseño barroco.


Justo en la entrada, hay un pequeño museo sajón donde se pueden admirar trajes tradicionales sajones, fotografías y otros artículos obsequiados por los miembros de la comunidad en Vines Valley. La iglesia está en la lista de monumentos protegidos de la UNESCO desde 1999.


Datos Útiles sobre la Iglesia Fortificada de Valea Viilor


Horario: De 09:00 a 12:00 y de 14:00 a 17:00
Aparcamiento gratuito.
Si la iglesia no está abierta, hay que llamar al número de teléfono escrito en la puerta y la persona que custodia la Iglesia vendrá a abrirnos.
El precio de la entrada es de 8 lei (1,50€) por persona.
14 comentarios
Hola Macare, la iglesia es una pasada y parece bastante impresionante, con esas paredes tan fuertes. Y esas piedras mas oscuras de la iglesia le hace mas interesante. Subir al campanario y ver su entorno desde arriba, creo que merece la pena por ver las vistas.
Me ha encantado. Besos.
Hola Cristina,
Uh, las escaleras de estas torres tienen bemoles, así que después de unas cuantas, a ésta no subimos. Es una fortificación muy bonita y única en su estilo. Me alegro que te haya gustado.
Muchos besos
hola, que bonita y me encantan estas visitas pero como tu dices, lo de subir esas escaleras yo tampoco lo haria.
Demasiados escalones, muy poca luz y bastante estrechos el interior de esos gruesos muros.
Por fuera parece que no es gran cosa pero por dentro es impresionante, me encanta. Un beso y feliz fin de semana Macarena ???
Esos muros son impresionantes, Vicenta. Un besazo
Me ha encantado estimada amiga. Es una iglesia con mucha historia y sobre todo conservando algunas cosas tal cual eran y fueron construidas. Es un placer estos reportajes que nos presentas. La fortificación que la rodea es preciosa.
Un fuerte abrazo y te deseo un estupendo fin de semana desde el Levante español.
Además, Juan, a ti que te gustan los jardines, te enamorarías de lo bien cuidado que tienen los parterres con cientos de bellas flores.
Mil gracias ¡Un fuerte abrazo!
Bien protegida está por ese muro. Viendo la primera foto parece metida en una especie de patio interior. Bonito altar tiene. Siempre que vamos a un lugar de estos subimos arriba y tengo la manía de contar las escaleras. Subiendo las 200 escaleras del campanario en La Concatedral de Stª María en Cáceres, me mareé al bajar, son de caracol y muy estrechas.
Buen domingo. Cuidaros.
Un abrazo.
Exactamente, Laura. Eso es lo que caracteriza a estas iglesias: ubicarlas en el interior de un patio rodeado de un muro, y ¡Parece que les funcionó!
No soy yo muy amiga de subir escaleras, salvo que me asegure unas vistas irrepetibles. Por lo general, me gusta ver el edificio, no lo que se ve desde él. No obstante, ya habíamos subido y bajado de otras muchas torres y decidí poner fin a aquello.
Un fuerte abrazo, Laura.
Me encanta.
¿sabes? Me he quedado anclada en esa verja original del S.XVI
Me fascina ser testigo de cosas así, me abrume y emociona estar cerca de algo con tanta historia. Directamente me lleva a pensar quiénes estuvieron en aquellos tiempos detrás de la reja, qué hacían, qué veían, qué pensaban, susurros, murmullos, miradas, silencios.
Testigo silente de pedazos de historia, nosotros formaremos parte de un pedazo pequeño, ella seguirá.
Me ha gustado todas tus explicaciones y las fotos que nos compartes, Macarena.
Ha sido como estar allí. ¡¡Gracias!!
Besote.
Muchas gracias, Nélida.
Yo también vivo mucho los lugares que visitamos y soy muy de imaginar. Así que este viaje a Rumanía me gustó mucho porque me transportó a la Edad Media, que es un periodo de la Historia que me resulta muy atrayente. En las Iglesias Fortificadas pensaba en el terror que debieron sentir quienes estaban allí encerrados durante los ataques. No podrían ni dormir. Debió ser aterrador.
Un beso grande.
Una Iglesia muy original, difiere bastante de las que hasta ahora nos has dado a conocer, Macarena.
Me han encantado esas torres tan especiales, el colorido altar y el dosel del púlpito.
He disfrutado conociendo la Iglesia Fortificada de Valea Viilor de tu mano.
Un abrazo y feliz semana.
Estas Iglesias son muy bonitas, Carmen. Además de singulares, el hecho de que estén en el interior de gruesos muros hace pensar que en algún momento la religión era más importante que en la actualidad y era necesario preservar los lugares sagrados.
Un fuerte abrazo.