La ruta por las Iglesias de madera de Maramures es uno de los circuitos más bellos y atrayentes que hacer en Rumanía tanto por su interés histórico, arquitectónico y artístico, como por los atractivos de la Región de Maramures, al Norte del País, una zona rural, muy auténtica y muchísimo menos visitada por el turismo que Transilvania. Visitar Maramures es, en definitiva, adentrarse en la Rumanía rural, la bella, la real.
Las famosas Iglesias de Madera de Maramures fueron levantadas entre los siglos XVII y XVIII sobre los cimientos de otras más antiguas debido a la prohibición de los invasores otomanos para erigir templos de ladrillo. Hechas de gruesos troncos en su base, destacan por sus altos tejados de madera y sus interiores decorados en policromía con escenas bíblicas.
De las 42 que han superado el paso del tiempo, ocho han sido incluidas en la Lista de la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad desde 1999. A saber:
- La Iglesia de la Presentación de la Virgen en el Templo (Barsana)
- Iglesia de San Nicolás (Budesti)
- Iglesia de Santa Paraskeva (Desesti)
- Iglesia de la Natividad de la Virgen (Ieud)
- Iglesia de los Santos Arcángeles (Plopis)
- Iglesia de Santa Paraskeva (Ponienile Izei)
- Iglesia de los Santos Arcángeles (Rogoz)
- Iglesia de los Santos Arcángeles (Surdesti)
Aunque se trata de una ruta de relativamente pocos kilómetros, lo ideal es emplear dos o tres días en llevarla a cabo para combinarla con otros atractivos de la zona como pueden ser la visita al Cementerio Alegre de Sapanta, el Memorial de las Víctimas del Comunismo y la Resistencia de Sighetu Marmatiei o el Tren de Mocanita en Viseu de Sus, por mencionar algunos de ellos.
Nuestra ruta por las Iglesias de Madera de Maramures comenzó, tras haber visitado el Cementerio Alegre de Sapanta y el Monasterio de Sapanta Peri, en Baia Mare, e hicimos noche, entre etapa y etapa, en Sighetu.
Iglesia de los Santos Arcángeles (Surdesti)
La primera iglesia que visitamos fue la de los Santos Arcángeles de Surdesti –citaré las siguientes según el orden en el que las visitamos-, de la que dicen ser el edificio más alto del mundo construido en roble. Tan sólo su torre mide 54 metros y la altura total desde el suelo es de 72 metros.
Se trata de una iglesia greco-católica, no ortodoxa, cuya peculiaridad, además de su altura es su doble fila de arcos en el porche.
Si interior se encuentra ricamente decorado con imágenes del Antiguo y Nuevo Testamento.
El coche se aparca en la parte baja de la colina en donde hay una caseta en la que has de pagar 7 lei (1,50€)y la señora te acompaña y te abre para que visites el interior. Si no se encuentra, puedes llamar al número de teléfono que hay colgado en la puerta.
Iglesia de los Santos Arcángeles Miguel y Gabriel (Plopis)
A menos de 10 minutos de Surdesti, se encuentra la Iglesia de Plopis.
Dicen que, aunque pequeña, se trata de una construcción equilibrada y bella con una muestra de los mejores frescos de Maramures. Pero cuando nosotros llegamos estaban restaurándola. Aun así, la señora de la caseta exterior nos cobró la entrada 5 lei (1€).
El interior estaba absolutamente destartalado y lleno de andamios, así que fue poco lo que pudimos ver, salvo el proceso de restauración de los frescos interiores.
Iglesia de San Nicolás (Budesti)
La Iglesia de Budesti data de 1643, por lo que se trata de una de las más antiguas de Maramures y está consagrada a San Nicolás. Con 18 metros, se trata de una de las de mayores dimensiones.
El interior posee un techo abovedado y dos niveles y, de entre sus peculiaridades, destacan las cuatro pequeñas torres en la base de la torre principal –que indican el reconocimiento del ius gladis a la comunidad del que hemos hablado en anteriores ocasiones-, elemento de extraordinaria rareza en las Iglesias de Madera.
La Iglesia conserva la armadura y el casco de, para unos, un bandolero y, para otros, un Robin Hood. Además, hay iconos pintados sobre cristal y madera, un manuscrito de 1684 y algunos libros litúrgicos de gran valor.
La de Budesti fue una de las que más me gustó por sus frescos interiores y su bello entorno.
Entrar en la Iglesia de Budesti cuesta 3 lei (0,60€).
Cuando llegamos a Iglesia de Budesti, tuvimos que llamar por teléfono para que vinieran a abrirnos y entretanto estuvimos merodeando por el cementerio. De hecho, es común que todas las iglesias de madera posean un cementerio aledaño lleno de cruces de madera y decenas de flores en las tumbas.
Iglesia de Santa Paraskeva (Desesti)
La de Desesti es la Iglesia con los frescos mejor conservados de todas las que vimos.
Se trata de una construcción de principios del siglo XVIII construída tras el incendio de una Iglesia anterior.
Cuenta la leyenda que la Iglesia fue levantada en el lugar elegido por la piedra del altar: cada vez que los aldeanos elegían un lugar, la piedra caía hasta que en una de las ocasiones, ésta permaneció de pie. Y fue allí donde se construyó la nueva iglesia.
Al igual que otras de su género, como la de Budesti, el tejado se encuentra levantado en dos tramos.
La Iglesia de Desesti tiene algo especial, y es que a pesar de alzarse sobre una colina, es casi invisible a la vista hasta que accedes por la escalera que lleva hasta ella.
Aquí tampoco había nadie cuando llegamos, pero el encargado no tardó en llegar cuando lo llamamos. El precio de la entrada es de 5 lei (1€), pero no nos cobraron por falta de cambio.
En mitad de nuestras visitas de ese día, comimos en una casa rural, llamada Casa Lu Ducha, que servía sólo menú del día: una sopa de tocino y deliciosos sarmales (103 lei = 20€) y aunque la comida estaba buenísima y el sitio era encantador, tardaron en servirnos toda una vida a pesar de que sólo había 6 mesas.
Dormimos en Sighetu, donde visitamos la Prisión Memorial Comunista, pero ni mencionaré el hotel porque fue un auténtico fiasco.
El Monasterio de Barsana
Al día siguiente, visitamos el Monasterio de Barsana, uno de los centros más importantes para la ortodoxia rumana que aúna en el interior del complejo la fe cristiana, la arquitectura en piedra y madera, típica de la región de Maramures, y una perfecta fusión entre las construcciones y el medio en el que se encuentra ubicado.
El complejo monástico está compuesto por varios edificios: una iglesia de madera, una iglesia nueva, un edificio residencial para monjes, una puerta tradicional y dos casas.
Las construcciones de madera fueron realizadas por artesanos locales, especializados en la carpintería.
La leyenda cuenta que, inicialmente, la iglesia estaba construida sobre un cerro cercano en el que se ubicó un cementerio para los muertos de una epidemia de peste, pero que a principios del siglo XIX la iglesia fue trasladada hasta el monasterio, momento en el que los muertos se desplazaron bajo tierra por el valle, para poder descansar en paz cerca de la torre de la iglesia.
La belleza de este lugar radica, además de en su cuidada arquitectura y la disposición del conjunto, en sus cuidados jardines y en su sintonía con el entorno que lo rodea.
Al visitarlo, se puede respirar la paz de un recinto sagrado y la música sacra y el tañer de las campanas acompañan la visita.
El Monasterio posee un aparcamiento gratuito, tiendas de objetos religiosos y, justo en su parte baja, un restaurante a bastante buen precio. Además, no cobran entrada.
Iglesia de la Natividad de la Virgen (Ieud)
La Iglesia de Ieud es una de las iglesias de madera más antiguas de Maramures.
La iglesia de madera de Ieud Deal representa la cima del arte y la técnica de construcción de iglesias de madera en Maramureș. Su valor se ve duplicado por un conjunto pictórico de la mejor calidad en su interior. El mural cubre toda la superficie interior de la iglesia, en el altar, la nave y el nártex.
Lo cierto es que se trata de una preciosa iglesia con una bóveda como el de la Iglesia de Plopis, pero carente de coro.
La Iglesia es de culto greco-católico y se trata de una de las edificaciones de madera más grandes del país. También se la conoce como «catedral de madera», por su monumentalidad y armonía de proporciones, y puede que sea la iglesia de madera más bella de Maramures.
La entrada para acceder a la Iglesia de Ieud es de 4 lei (0,80€)
Viseu de Sus y El Tren de Mocanita
Tras visitar la Iglesia de Ieud nos dirigimos a Viseu de Sus para comprar las entradas para el Tren de Mocanita para el día siguiente, pero estaba todo lleno.
Yo permanecí en la estación con cara de pena viendo los trenes llegar tras las excursiones del día, pero al ver desembarcar a la muchedumbre sin mascarillas ni control, pensé que no haber encontrado billetes era lo mejor que podía haber pasado.
En Viseu de Sus dormimos en un bello y acogedor alojamiento llamado “Casa Paul” que nos costó 39€ y tenía en la habitación la tele más grande que he visto en mi vida. Bueno eso y vistas al río, una estufa de leña, una zona común para cenas y desayunos, un huerto, lugar para aparcar el coche y un dueño la mar de cachondo que no hablaba ni papa de ningún idioma conocido.
Datos útiles sobre las Iglesias de Madera de Maramures
Existen 42 Iglesias de Madera en la región, siendo sólo ocho de ellas Patrimonio de la Humanidad.
La ruta para ver las Iglesias únicamente es viable en coche.
Aunque no hay por qué verlas todas, en la ruta para ver sólo unas pocas de ellas se emplean dos o tres días y se puede incluir, junto a la visita, otros lugares de Maramures como los citados en la introducción.
No existe un canon fijo para visitar las Iglesias, sino que la cuantía de la entrada que, en general es pequeña, depende de lo que haya acordado cada comunidad, no excediendo del euro o euro y medio.
En todas las Iglesias hay un aparcamiento cercano y gratuito en el que dejar el coche.
En la mayoría de las Iglesias hay también, y junto el aparcamiento, cuarto de baño disponible y gratis.
Algunas de las Iglesias poseen una casita exterior donde se encuentra la persona a cargo de la Iglesia: allí se paga el “donativo” y la persona se encarga de abrir la puerta y permanece allí para cerrar de nuevo. Además, se encarga de resolver cualquier duda relativa a la Iglesia.
En otras Iglesias se puede encontrar un número de teléfono al que llamar en caso de querer visitar la Iglesia por dentro. La mayoría habla inglés, pero si no es así, con decirle church o biserica, en unos minutos vendrá a abrir.
Por norma, no existe un horario para visitar las Iglesias de madera, aunque suelen cerrar sobre las 16:00 ó 17:00 horas. De todas formas, a alguna de ellas llegamos más tarde de las cinco de la tarde y nos abrieron igualmente.
En el interior es posible realizar fotografías sin flash, aunque muchas de ellas no permiten grabar en video. No obstante, nosotros fuimos preguntando primero.
Algunas de ellas dan apariencia de ser iglesias nuevas por el color de sus tejados, mucho más claro. Pero el recubrimiento de los tejados de madera debe ser renovado periódicamente cada cierto tiempo con la finalidad de mantener los edificios y evitar que la humedad y el frío termine por corroer la madera y perjudicar a otras estructuras de las construcciones.
10 comentarios
Qué bonitas las fotos, me encantan estas entradas donde descubro sitios nuevos que desconocía. Me ha hecho mucha gracia lo de que tardaron una vida en serviros aunque solo había 6 mesas, me ha recordado muchas ocasiones aquí así que veo que en todas partes nos encontramos gente que se toma todo con muuuucha calma, jajaja.
Asun, fíjate si se me clavó a fuego. Es que, además, no había ni menú. Te servían lo que habían cocinado: caldo de tocino y sarmales para todo el mundo; luego no pude entender la tardanza. Yo creo que eran nuevos y de ahí la descoordinación, pero hizo que me desesperase.
Un besazo.
Son bonitas y muy originales pero tiene que dar mucha faena el mantenimiento de la madera. Un beso
Son muy bonitas, Vicenta, y muy diferentes a las iglesias que conocemos.
Un beso!!!!
que pasada, sobre todo esas iglesias de madera, me han parecido muy originales y dignas de ver. Gracias por compartirlo.
Gracias a ti!!!
Si las visitas van acompañadas de buena música , relajo total Macarena.
Esas iglesias necesitaran mucho cuidado por ser de madera y se ve que las cuidan bien. Preciosos los jardines. El restaurante no era para ir con hambre ni con prisas :)) Buen reportaje.
Buena noche familia.
Un abrazo.
Periódicamente cambian la madera de los tejados y le aplican productos para mantenerla. La verdad es que debe ser un trabajazo, pero merece la pena conservar estas obras de arte.
La ruta fue realmente bonita. Creo que es de esos lugares que te gustarían.
Un fuerte abrazo, Laura.
Hola, Macarena.
Qué alegría tenerte de vuelta!!. Te echábamos de menos (al menos hablo por mí) y mucho!!
Veo que regresas a lo grande, compartiéndonos una entrada la mar de completa y bonita. Sí, me ha gustado especialmente esta ruta de las Iglesias y descubrir cómo tú dijiste “la Rumanía más rural, la bella, la real”.
La arquitectura de estas iglesias me pareció muy peculiar y fácilmente distinguible de otras muchas que podamos conocer. Pero sobre todo me encantó su interior, qué maravilla poder ver tan de cerca esos frescos conservados después de varios siglos. Una auténtica joya.
Gracias por compartirlo, Macarena.
Un beso enormeee.
Bueno, bueno Nélida, he vuelto a medio gas por el momento ¡No dejo de estar liada! Pero bueno, a ver si acabo esta serie de Rumanía. La siguiente, de Balcanes, va a estar también muy curiosa.
Esta ruta es bonita de hacer por sus peculiaridades y la autenticidad de la zona. Me alegra que te haya gustado.
Gracias a ti. Un besazo.